La Justicia española ha desmantelado y detenido en Mauritania al cabecilla de una red que se dedicaba a captar a ciudadanos de origen pakistaní y bangladesí en sus países de origen y los trasladaba en patera o cayuco desde las costas de Marruecos o Mauritania a las Islas Canarias o a distintos puntos de la península, como Almería.
La investigación iniciada en el 2023 tras la llegada a Canarias en los años 2021 y 2022 de diversas embarcaciones a Gran Canaria y Fuerteventura con ciudadanos asiáticos ha culminado con la detención en Mauritania de Mohamed Shajhan Sheak, conocido como Mastermind, cabecilla de la organización y que este martes, una vez extraditado a España, ha ingresado en prisión provisional, comunicada y sin fianza.
Para llegar hasta Mastermind han sido claves las declaraciones de cuatro migrantes y un colaborador de la banda
Fue el pasado 11 de febrero cuando el juzgado de Instrucción número 1 de Las Palmas firmaba un auto de búsqueda y emisión de una orden europea e internacional de detención del ciudadano apodado Mastermind a instancia de la fiscal delegada autonómica de Extranjería de Canarias, Teseida García, por un presunto delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
Para llegar hasta Mastermind han sido claves las declaraciones de cuatro migrantes de origen pakistaní y bangladesí que llegaron a las islas en cayuco al amparo de esta red y de un colaborador de la trama de origen asiático, hoy convertido en testigo protegido y que en junio de 2024 fue condenado a tres años y medio de cárcel por un delito contra los derechos de los extranjeros. Su pena fue rebajada por colaborar con la Justica.

Migrantes pakistaníes en La Laguna, Tenerife
Además del cabecilla de la red los testimonios han apuntado a otras dos personas que eran colaboradoras en la trama: Humayun Ali, el número dos de la organización y que cobraba y recibía el dinero de las víctimas, y Ali Sangare, que se encargaba de trasladar a las víctimas desde sus ubicaciones en Marruecos o Mauritania hasta la playa de la que partían las embarcaciones hasta España. Muchas de ellas, como se recoge en el auto -adelantado hoy por CANARIAS7-, no lograron llegar a su destino y sus ocupantes fallecieron en el trayecto pese a haber pagado cantidades que superaban los 13.000 euros.
Según recoge el auto de detención internacional, la organización criminal estaba integrada también por varios ciudadanos de Bangladesh que contactaban con compatriotas en el país para ofrecerles emigrar a Europa pese a no contar con la documentación ni cumplir con las requisitos legales para entrar de forma regular al continente. Previo pago de 13.000 euros la red trasladaba a los migrantes hasta Emiratos Árabes en vuelos regulares y una vez en el país, les desplazaban por carretera hasta Mauritania. Entraban en el país africano con documentación falsa y en ocasiones se sobornaba a agentes en los controles para facilitar su libre tránsito, según recoge el auto. Uno de los migrantes que ha ayudado a destapar la red, aseguró en su declaración que llegó a pagar 70.000 euros y que contactó con la red en Nueva Delhi desde donde viajó hasta Argelia, para cruzar la frontera con Marruecos por la montaña.
Una vez en Marruecos o en Mauritania la organización conseguía a los migrantes alojamiento hasta que se les trasladaba a un playa para coger el cayuco. Las embarcaciones, como apunta el auto, estaban en mal estado de mantenimiento y no reunían las condiciones necesarias para realizar la travesía con seguridad. En ocasiones, las salidas se frustraban porque eran descubiertos por los agentes, que a veces también les auxiliaban cuando había riesgo de naufragio.
Cuando las víctimas no habían pagado la totalidad del viaje se les ponía a trabajar a los migrantes en negocios, normalmente restaurantes, que Mastermind tenía en Mauritania, hasta que cubrían todo el coste. Otras veces eran sus familias las que abonaban la parte que faltaba, según recoge el auto.
Captaban a los migrantes en su país, les llevaban en vuelo comercial hasta Emiratos y de allí en carretera a Mauritania o Marruecos previo pago de 13.000 euros
El viaje se realizaba sin ninguna seguridad y sin la comida o el agua necesario para la travesía. “A veces por las malas condiciones de la embarcación y porque en su interior traslada a muchas más víctimas de las que podrían desplazar de forma segura, han fallecido parte de los ocupantes porque tampoco facilitan alimentación, bebida, ropa o equipos para la navegación de manera que cuando surgen algún contratiempo algunos no sobreviven”, recoge el auto.
El testigo protegido que ha sido clave para llegar hasta Mastemind y que colaboraba con la red, asegura que el cabecilla fue responsable de nueve viajes de cayuco desde las costas africanas a España, tanto Canarias como Almería, y en ocasiones con resultado de muertos. En su declaración apunta a una embarcación que partió en junio de 2021 con 52 personas de El Aiún y que nunca llegó falleciendo todos los ocupantes. También señala a otra, que salió en enero de 2022 con 60 personas y que naufragó dejando 24 muertos.
Muchos de los migrantes fallecieron en la travesía a Canarias
En octubre de 2024 el Ministerio del Interior reconoció que estaba investigando el cambio de las rutas migratorias tras llegar en un cayuco a Canarias 65 pakistaníes.