El alcalde de Arbeca (Lleida) Sergi Pelegrí) investigado por agresión a su expareja y morder a un mosso, ha registrado este martes en el Ayuntamiento su renuncia a la alcaldía y continuar como concejal.
Su renuncia, será tratada como un asunto de urgencia en el pleno ordinario de esta noche al que no tiene previsto asistir. Lo planteará ERC, el partido por el que se presentó a la alcaldía aunque no es militante.
Antes de registrar su renuncia, Pelegrí, ha solicitado este mismo martes al servicio de secretaría la habilitación del primer teniente de alcalde, Francesc Roset para que conduzca la sesión plenaria.
El Ayuntamiento tiene ahora diez días para convocar un nuevo pleno en el que se nombre un nuevo concejal y se elija al alcalde o alcaldesa, que seguirá siendo de ERC. ERC tiene seis concejales, el PSC cuatro y Junts uno.
Los Mossos d'Esquadra detuvieron a Sergi Pelegrí a primera hora de la madrugada del sábado como presunto autor de los delitos de violencia en el ámbito familiar y atentado a agentes de la autoridad
Durante la detención, en su vivienda y en presencia de sus hijos, Pelegrí mordió a uno de los agentes de la comisaría de Les Borges Blanques que le detuvo.
Por la tarde, su expareja, en un comunicado, se mostró molesta con la repercusión mediática que ha tenido el caso y consideró que “ha supuesto un menoscabo personal y un perjuicio a la imagen” de Sergi Pelegrí. Aseguró también que lo sucedido “en ningún caso se pueden asociar a un delito de maltrato en el ámbito del hogar”.
El mismo sábado, tras prestar declaración, el juez acordó libertad para Pelegrí. La investigación sigue su curso en dos causas: maltrato puntual y atentado a la autoridad.
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Este era el segundo mandato de Pelegrí, que es conseller en el Consejo Comarcal de las Garrigues y director de la Escuela Abat Ruera de Puiggròs, un municipio que se encuentra a pocos kilómetros de Arbeca.
El grupo municipal de Compromís per Arbeca, vinculado al PSC, ha emitido un comunicado donde condena los hechos y pide la dimisión de Pelegrí. Valoran con “dolor y preocupación” la noticia a pesar de que todavía no exista una condena judicial firme. En este sentido, remarcan que los hechos que se le imputan son “absolutamente incompatibles” con el comportamiento que se espera de un cargo electo y representante de una institución pública como es el Ayuntamiento de Arbeca.