La campaña de excavaciones de 2025 llevadas a cabo en los yacimientos de Atapuerca, ha revelado la aparición de un nuevo conjunto compuesto por diez fósiles de homo antecesor, entre los que destaca una vértebra cervical de un individuo infantil de entre dos y cuatro años de edad que certifica “la práctica del canibalismo en esta especie”.
Así lo ha explicado la codirectora Marina Mosquera quien junto al consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, ha presentado el balance de la campaña de excavaciones de este verano.
Alguno de estos restos presenta huellas de carnicería “en forma de marcas de corte e impactos de percusión”, derivados de su fracturación para el “aprovechamiento de la médula ósea”, ha indicado la codirectora.
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Se trata de nuevas muestras de las prácticas caníbales registradas en TD6, habituales en el Homo Antecessor. En concreto, los restos de este individuo infantil “presenta unas marcas de corte derivadas de la separación de la cabeza del tronco”, ha explicado Marina Mosquera.
El equipo de codirectores de las excavaciones de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca ha hecho un balance “muy positivo” de la campaña de 2025, que se ha cerrado este miércoles. A lo largo del último mes, “más de 300 investigadores” ha trabajado en los yacimientos de la Sima del Elefante, Galería, Nivel T3 y Nivel TDI, de Gran Dolina, Penal, Cueva Fantasma, Cueva del Mirador, el asentamiento al aire libre de la base Aymerich, en Cueva Mayor, Portalón, Sima de los Huesos y Galería de las Estatuas, así como en el lavadero de sedimentos.
Entre el resto de los hallazgos, destacan también dos dientes que han permitido identificar “un nuevo individuo”, adulto, joven; además, tres nuevas vértebras, una falange del dedo índice, un fragmento de costilla y tres fragmentos de huesos de las extremidades.
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Los restos de esta campaña en TD6, que ya cuenta con 200 fósiles humanos, “augura unas excelentes campañas para los próximos años”, ha asegurado Mosquera, quien ha explicado que hace dos años ya aparecieron restos de un campamento de 850.000 años con 180 fósiles, de gran cantidad de restos de ciervos, caballos, bóvidos y otros animales, así como un conjunto de herramientas de piedra.
Otro de los yacimientos, relacionados con gran Dolina, es Penal, que, en apenas cinco metros cuadrados, ha proporcionado una docena de piezas de industrial lítica elaboradas sobre cinco tipos distintos de materias primas y que se conecta con primero de los yacimientos.
Por su parte, Gonzalo Santonja ha calificado a los yacimientos de Atapuerca, como “santuario de la belleza y universidad” donde compartir y aprender. El consejero ha valorado la asunción de las responsabilidades “de los seis nuevos codirectores”, dos por cada uno de los tres que han llevado las excavaciones en los últimos tiempos.