No hay ni habrá pacto. Esto era y es conocido. Los gremios de doctores, que llevaron a cabo una huelga de cuatro días la semana anterior, abandonaron la reunión organizada por el Ministerio de Salud al notar que la cartera de Mónica García se rehúsa a debatir sobre un estatus particular para ellos (en la actualidad, es un acuerdo laboral que engloba a las profesiones sanitarias). Salud reitera que no es posible, que se requiere una reforma legal, y propone una sección específica dentro del estatuto marco general. Sin embargo, los médicos no lo desean.
El comité de huelga, compuesto por los sindicatos médicos, afirma que fue el Ministerio de Sanidad quien interrumpió las negociaciones. De acuerdo con su versión, los tres altos cargos ministeriales habituales asistieron a la reunión, a los que se unió por primera vez el secretario general de Sanidad, Javier Padilla. Este último intervino para declarar que el ministerio daba por concluidas todas las negociaciones, dado que ya se había logrado un preacuerdo en la reunión del Ámbito (una mesa de diálogo que incluye a los sindicatos que representan a los diversos grupos de profesionales sanitarios) celebrada el lunes anterior, y que no se mantendrían dos canales de conversación simultáneos.
Ante la falta de voluntad de negociar uno de los seis puntos iniciales acordados el pasado jueves 11 de diciembre, y la interrupción total de las conversaciones con el Comité de Huelga, los representantes de los médicos han optado por retirarse de la reunión, según informan la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) y el Sindicato Médico Andaluz (SMA). Las jornadas de paro convocadas para enero permanecen vigentes.
El grupo de García respalda el pacto temporal que se logró con los demás profesionales de la salud.
¿Cuál es la postura de Sanidad? Bueno, concuerda parcialmente con lo que estos relatan: que los delegados del ministerio propusieron a CESM-SMA unirse al acuerdo logrado con las organizaciones sindicales que forman parte del Ámbito de Negociación, “órgano legítimo y legalmente constituido para la negociación colectiva en el Sistema Nacional de Salud”, pero que “ninguna de las propuestas trasladadas obtuvo respuesta, rompiéndose así unilateralmente el proceso de diálogo”, según informaron fuentes del ministerio. En otras palabras, que se retiraron y abandonaron la reunión.
El ministerio de Mónica García subraya que la nueva redacción, surgida tras el acuerdo preliminar con las cinco entidades del Sector, incluye progresos en materia de derechos laborales, la estructura del trabajo, el equilibrio entre vida personal y profesional, la eliminación gradual de turnos de 24 horas, traslados con protecciones y el fortalecimiento del sistema de gestión público. Sin embargo, advierte, no es posible avanzar más debido a la invasión de facultades regionales y a que un estatuto general por especialidades desmantelaría la unidad del Sistema Nacional de Salud.
