Picasso, un artista rebelde en Barcelona

Cuerpos dibujados con figuras geométricas, caras con formas imposibles, colores vivos e impactantes… El estilo de Pablo Picasso es tan reconocible como único.

El artista español creó miles de cuadros, dibujos, acuarelas y esculturas, a través de los cuales transmitía su estado ánimo, sus vivencias y sus sentimientos. Desde el miedo y el sufrimiento del Guernica, hasta su particular interpretación del cuadro de Las Meninas de Velázquez.

Picasso es uno de los pintores más universales. Sus obras se han expuesto en museos de todo el mundo y su estilo ha influido a muchos otros artistas… pero ¿sabías que su carrera como pintor empezó en Barcelona?

Barcelona, la ciudad donde empezó todo

Pablo Ruiz Picasso nació en Málaga el 25 de octubre de 1881, pero su familia se trasladó a Barcelona cuando tenía tan solo 14 años. Fue allí donde empezó a pintar y a desarrollar su técnica.

El joven Picasso era un chico rebelde e inquieto. Solía distraerse en el colegio y sus profesores lo castigaban fuera de clase, lo que se convertía en una oportunidad para dibujar. ¡Era lo que más le gustaba!

Por eso, uno de los momentos más importantes en su carrera fue cuando se matriculó en la Escuela de Bellas Artes de la Lonja, donde pudo dar un empujón definitivo a su formación artística.

El padre de Picasso también era pintor y profesor de arte. Cuenta la leyenda que, cuando se dio cuenta del gran talento de su hijo, decidió no volver a pintar nunca más.

Un joven rebelde en una ciudad moderna

Picasso vivió en la calle de la Mercè, muy cerca del mar. Le gustaba moverse por los ambientes artísticos de la ciudad, donde se encontraban los grandes artistas e intelectuales de la época.

Uno de esos sitios era la taberna de Els Quatre Gats, donde Picasso y sus amigos discutían sobre la vida y el arte. En este local emblemático hizo su primera exposición de pinturas e incluso llegó a diseñar la portada de su carta.

La Barcelona de principios de siglos era una ciudad moderna y cosmopolita, el lugar ideal para un joven inquieto en busca nuevas experiencias.

Así fue como Picasso empezó a definir su estilo personal, empezando por el conocido “periodo azul” entre 1901 y 1904. En los cuadros de esta época predominan las tonalidades azules, que transmiten pena y tristeza: así es cómo se sentía Picasso tras el suicidio del pintor Carlos Casagemas, un amigo muy cercano.

El artista acabó trasladándose a Francia, donde desarrolló su carrera y vivió gran parte de su vida. pero la huella de Picasso en Barcelona quedó para siempre. Descubre cómo la ciudad influyó en su obra en el Museu Picasso de Barcelona.

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