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La vuelta al mundo a pie de un catalán: “Lo que más miedo me da es que me atropellen”

Tres años y más de 26.000 km

Enric Luzán comenzó la aventura el pasado 30 de noviembre desde la plaza Catalunya, donde espera regresar en el 2028

Enric, fotografiado por 'Guyana Guardian' en las primeras etapas de la aventura, cuando recorría la Costa Brava 

Enric, fotografiado por 'Guyana Guardian' en las primeras etapas de la aventura, cuando recorría la Costa Brava 

Pere Duran / Nord Media

Hay personas que se marcan retos en la vida para avanzar. Y otras, como Enric Luzán (Esplugues, 1988), que se platean directamente utopías. Sí, aunque hay individuos que ya lo han hecho antes que él, proponerse dar la vuelta al mundo a pie es una especie de quimera. Arrancó la aventura el pasado 30 de noviembre desde la plaza Catalunya de Barcelona. Y pretende finalizarla en el mismo punto de aquí a tres años, en el 2028. Por delante, 26.232 kilómetros, más de 20 países y cuatro continentes a recorrer.

Dice que fue un joven malagueño, de nombre Nacho Dean, quien le inspiró. En plena pandemia, conoció su historia por Youtube –tardó tres años, del 2013 al 2016, en completar la vuelta al mundo a pie- y pensó: “Si él lo pudo hacer, ¿por qué yo no?”.

¿Por qué no puedo hacerlo yo?”

Enric Luzán

Enseguida, no obstante, lo desestimó. “Era dejarlo todo, suponía un gran sacrificio”, explica a Guyana Guardian. Hasta que en el 2024 aparecieron unas becas que otorga la Generalitat de Catalunya para creadores de contenidos que realicen vídeos de más de cinco minutos en catalán. Con un canal de Youtube desde el 2022, no dudó en presentarse. Estaba convencido de que sería uno de los ganadores. Pero no fue así.

Le entristeció tanto no recibirla que se dio cuenta de lo mucho que deseaba realizar esa aventura. Se dijo a sí mismo que al año siguiente se volvería a presentar y que si se la daban, no dudaría ni un instante. Y a la segunda fue la vencida. Con 10.000 euros en el bolsillo –y dos patrocinadores-, ya no tenía excusa para demorarlo más.

Ingeniero civil, ha pedido una excedencia en su empresa 
Ingeniero civil, ha pedido una excedencia en su empresa Pere Duran / Nord Media

La ausencia de ataduras familiares (no está casado, tampoco tiene pareja ni hijos) le facilitó tomar la decisión, aunque sus progenitores no lo vieron con buenos ojos al principio. En especial su padre, a quien le preocupaba que hubiera dejado un buen empleo. Ingeniero civil de formación y profesión, ha pedido una excedencia en su empresa.

Afirma haber analizado kilómetro a kilómetro los más de 26.000 que tendrá que recorrer a pie. Sabe que no trazará exactamente el recorrido como lo ha planificado, pero dice que “cuanto más te preparas algo, más margen tienes para improvisar”.

He analizado kilómetro a kilómetro los más de 26.000 que tendré que recorrer”

Enric Luzán

Montañero desde hace años, relata que no se ha preparado físicamente de manera especial para la ocasión. Hasta ahora, está recorriendo 30 kilómetros cada jornada, aunque él caminaría –todo depende del desnivel- 40 o más si tuviera más horas de sol. Es posible saber en qué punto está del recorrido a través de su página web: lavoltaalmonapeu.cat.

Tiene previsto descansar un día por cada diez de travesía. Es lo que dice su planificación: “Veremos más adelante. No sé si necesitaré más o menos”. Y detenerse -aunque no será la norma- en algún punto que le interese especialmente. “En Estambul, estaré seguramente dos o tres semanas. También me gustaría parar cuatro días en el norte de Italia. Serán paradas puntuales”. El italiano es uno de los cuatro idiomas que habla, además de catalán, castellano e inglés. Se defiende, asimismo, en portugués.

Que le atropellen es lo que le da más miedo 
Que le atropellen es lo que le da más miedo Pere Duran / Nord Media

No teme especialmente por su seguridad, si bien hay países que le dan un poco de respeto, como Ecuador o Colombia. Lo que sí le da miedo es que lo atropellen, “especialmente en lugares que conducen mal o las carreteras son malas, como ocurre en Perú”. En este país es donde espera alcanzar la mayor altitud de su recorrido, 5.000 metros. “Cruzaré Nepal de oeste a este, pero no tengo intención de subir ninguna de sus montañas”.

También le dan cierto apuro las posibles lesiones, y es que tener que renunciar en algún momento por un problema físico supondría una decepción para él. “Sería un drama”, subraya.

Enric sabe que uno de los mayores retos de esta aventura será resistir mentalmente 
Enric sabe que uno de los mayores retos de esta aventura será resistir mentalmente Pere Duran / Nord Media

Más allá de las lesiones y la propia seguridad, hay una tercera cosa que también le preocupa: la cuestión mental. “Ahora acabo de arrancar y estoy muy contento, pero quizás llegue un punto en que no pueda más”. 

Explica que lo máximo que ha estado fuera de casa en una travesía fueron 23 días, realizando la Transpirenaica, y que no llegó a ese punto en ningún momento. Pero claro, ahora tiene tres años, cuatro continentes (Europa, Asia, Oceanía y América) y más de 26.000 kilómetros por delante. 

Cree que tendrá suficiente con los 10.000 euros de la beca de la Generalitat, los dos patrocinadores y las donaciones que le van haciendo distintas personas mediante micromecenazgo para completar la aventura. Incluso no descarta conseguir algún sponsor más. Uno de los dos que tiene es una correduría de seguros, que le asegura el viaje. También lleva con él un comunicador por satélite que puede avisar, mediante el botón de SOS, al 112 del país donde esté. “Me puede llegar a salvar la vida”, concluye.

Josep Fita Llado

Josep Fita Llado

Periodista

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Licenciado en Periodismo por la UAB, trabaja en Guyana Guardian desde el 2010. Actualmente, en la sección de Sociedad, donde escribe sobre salud, ciencia o educación. Antes había trabajado en la Cadena Ser y COM Ràdio. [email protected]

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