Un nuevo estudio clínico realizado por la Universidad de Hasselt (Bélgica) y publicado en la revista 'Nutrition and Diabetes' ha revelado que el consumo de zumo de naranja natural no eleva los niveles de insulina en sangre en comparación con la ingesta de la fruta entera. Así lo recoge un comunicado del Fruit Juice Science Centre (FJSC), que destaca la ausencia de diferencias significativas en la respuesta glucémica e insulínica entre ambas formas de consumo, incluso en personas con diabetes tipo 2 bien controlada.
La investigación analizó a adultos con sobrepeso leve y diabetes tipo 2, quienes, en tres ocasiones distintas, desayunaron un menú alto en carbohidratos acompañado de trozos de naranja, un vaso de zumo natural o una bebida azucarada con sabor a naranja. Los niveles de glucosa e insulina se midieron durante las cuatro horas posteriores a cada comida. “Esperábamos que el zumo o la bebida azucarada generaran picos de glucosa más altos que la fruta entera, pero no encontramos diferencias significativas”, explicó Kenneth Verboven, investigador principal del estudio.
El FJSC subraya que los azúcares presentes en el zumo de fruta natural provienen de la propia fruta y no afectan negativamente a los niveles de azúcar o insulina en sangre. Además, el zumo de naranja 100% natural aporta vitaminas, minerales y compuestos bioactivos comparables a los de la fruta entera, como la vitamina C, el folato y el potasio, así como flavonoides con efectos antioxidantes y antiinflamatorios.
Pese a estos hallazgos, la percepción negativa sobre el zumo de naranja persiste entre los consumidores: según una encuesta del FJSC, un 33% de los españoles evita comprar zumo natural por considerarlo poco saludable. Los expertos recuerdan que, aunque la fruta fresca es la opción más recomendable por su contenido en fibra, un vaso de zumo natural puede ser una alternativa práctica y nutritiva, especialmente para quienes viven con diabetes tipo 2 bien controlada.


