Hoy, niños y adolescentes tienen acceso a internet desde edades cada vez más tempranas. Con un solo clic, pueden encontrar millones de contenidos relacionados con el sexo: desde información útil y educativa hasta pornografía explícita. Y, la mayoría de las veces, lo que aprenden allí no tiene nada que ver con una sexualidad sana, respetuosa y realista.
Carola Salgado es una psicóloga sanitaria que promueve una crianza reflexiva, donde el autoconocimiento del adulto es clave para establecer vínculos sanos y evitar conflictos emocionales. En uno de los vídeos más recientes de su canal de TikTok, ha reflexionado sobre el peligro de evitar las conversaciones sobre tener relaciones: “Si no hablas con tus hijos sobre tener relaciones, las pantallas lo harán por ti y lo que enseñan no se ajusta a la realidad”, empieza diciendo.
Adolescentes
“A veces una conversación a tiempo puede cambiar mucho las cosas”
Contenido para adultos. La experta señala que cada vez más adolescentes consumen contenido para adultos antes de tener su primera relación: “Lo que no saben es que están construyendo sus ideas sobre el cuerpo, el placer y la conexión emocional, basándose en el algo que no es real”, comenta.
Adolescentes
¿Cuál es la solución? Carola afirma que no se trata de prohibir, sino de acompañar. Por que cuando nadie habla con ellos sobre esto, el contenido es su único referente y muchas veces lo que aprenden no les hace bien.
Diálogo y educación
- Diálogo abierto y sin prejuicios. Hablar con naturalidad sobre dudas, emociones, consentimiento, uso de métodos de protección, relaciones igualitarias y afecto. Evitar que la primera información sexual venga de una pantalla.
- Educación sexual integral en familia y escuela. Debe incluir afectividad, diversidad y ética.
- Límites digitales y supervisión razonable. Establecer límites claros al acceso libre a internet y activar filtros parentales especialmente en contenidos sexuales.
- Capacitación emocional y crítica mediática. Enseñar a los jóvenes a cuestionar lo que ven en pantalla, a identificar distorsiones y a confiar en su percepción corporal y emocional.

