Lo que prometía ser un día perfecto acabó convirtiéndose en una experiencia que cambiaría para siempre la vida de Xavi Caballol y Alba Serch. La pareja, conocida en redes sociales por su estilo de vida lujoso y su contenido desenfadado, sobrevivió milagrosamente a un accidente de avioneta que dejó secuelas físicas y emocionales, pero también una nueva perspectiva sobre la vida.
Un día cualquiera que terminó en tragedia
El pasado 19 de octubre. Xavi y Alba se subieron a una avioneta con la intención de disfrutar de una tranquila jornada en el restaurante Momma Cerdanya. Sin embargo, la tarde dio un giro dramático cuando la aeronave sufrió un fallo mecánico y terminó estrellándose desde una altura de más de 150 pies.
Xavi recuerda cada segundo de aquel momento con angustia en una entrevista en Crónica Global: “Nos hemos matado. Si no hemos muerto, por favor, que sea rápido”, pensaba mientras la sangre le nublaba la vista y los gritos de Alba resonaban en su cabeza. Por su parte, Alba apenas guarda recuerdos, ya que perdió la conciencia durante el impacto.
Secuelas físicas y emocionales. Ambos sufrieron múltiples fracturas: tobillos desintegrados, vértebras dañadas, clavículas rotas, tibias, peronés, fémures y hasta una lesión craneal que afectó la movilidad facial de Xavi. “El dolor es inhumano”, reconoce él con sinceridad.
A pesar del sufrimiento, la pareja intenta tomarse la situación con humor. “Llevamos una ferretería dentro”, bromean al enumerar la cantidad de tornillos y placas que ahora forman parte de sus cuerpos.
Una segunda oportunidad y un cambio de valores. El accidente no solo dejó cicatrices físicas, sino que también les obligó a reflexionar sobre sus prioridades y la forma en la que habían vivido hasta ahora. “Siempre hemos sido egoístas, centrados en nosotros mismos. Ahora sentimos la necesidad de ayudar a los demás”, explica Xavi.
Durante su estancia en el hospital, el empresario forjó una conexión especial con otro paciente que luchaba contra el cáncer. Un pequeño gesto, como compartir un cigarrillo, se convirtió en un símbolo de apoyo y empatía. “Ese pequeño momento significó mucho para él, y para mí también”.
El fin de 'Ferrariman'
Un personaje popular en redes sociales. Xavi, conocido en redes por su alter ego 'Ferrariman', ha decidido dejar atrás esa etapa. “Está muerto”, sentencia. Asegura que ya no se siente cómodo con ese personaje que solía mostrar una vida repleta de lujos y excentricidades. “Entiendo que ver a alguien derrapando con un Ferrari puede molestar a quien está pasando por un mal momento”.
El Ferrari de Xavi con una bandera de Andorra
En su lugar, planea utilizar su plataforma en redes sociales para inspirar y ayudar a los demás. Además, está trabajando en un libro donde relatará su experiencia y espera que su historia sirva para transmitir un mensaje de superación.
Una nueva perspectiva de vida. La pareja, que ahora se recupera en su hogar en la Costa Brava, destaca que pequeños gestos pueden marcar una gran diferencia. “No hace falta hacer cosas grandiosas para ayudar. Una sonrisa puede cambiar el día de alguien”, reflexiona Xavi.
Aunque el camino hacia la recuperación es largo, ambos se muestran agradecidos por esta segunda oportunidad. Han dejado claro que sus vidas han cambiado para siempre y que, a partir de ahora, cada pequeño gesto de amabilidad contará.
Vía Crónica Global y @xavi.caballol


