El autor y comunicador británico Jay Shetty, conocido por su trayectoria como exmonje y por sus charlas motivacionales sobre amor, propósito y bienestar emocional, ha vuelto a conmover a millones de personas con una de sus reflexiones más sencillas y poderosas.
En un vídeo compartido en TikTok, Shetty recuerda que la vida está llena de pequeños gestos que damos por sentados, pero que en realidad son auténticos regalos cotidianos. “Si todavía ves a tu madre llamándote al teléfono, eso es un regalo. Si tu padre aún marca tu número, eso es un regalo. Si tus hermanos te mandan mensajes al azar, eso es un regalo”, comienza diciendo el coach.
La importancia de no olvidar los regalos de cada día
Con este mensaje, Jay Shetty —autor de los libros Think Like a Monk (Piensa como un monje) y 8 Rules of Love (8 reglas del amor)— pone el foco en algo esencial: la gratitud diaria. En una época marcada por la prisa, la desconexión y la constante búsqueda de más, Shetty propone un cambio de perspectiva: valorar lo que ya tenemos.
Un abuelo jugando con su nieto
“No olvides los regalos que recibes cada día”, concluye el vídeo, recordando que la presencia de las personas que queremos —aunque sea en forma de una simple notificación en el móvil— es un motivo suficiente para sentirnos agradecidos.
Madre e hija
Una lección sobre la gratitud y la presencia. El mensaje ha resonado especialmente entre quienes han perdido a un ser querido o viven lejos de su familia. Shetty, que ha dedicado gran parte de su carrera a divulgar herramientas para el equilibrio emocional, insiste en que la gratitud no solo mejora la salud mental, sino que nos conecta con lo verdaderamente importante.
Captura de vídeo
En un mundo donde las conversaciones se miden en mensajes de texto y las relaciones se diluyen entre pantallas, su recordatorio es claro: “Cada llamada, cada voz y cada gesto de cariño son regalos que no durarán para siempre.”
A veces, el mayor acto de consciencia es simplemente detenerse un segundo, mirar el teléfono y sonreír al ver ese nombre familiar que sigue apareciendo en la pantalla. Porque, como dice Shetty, la vida está llena de regalos que aún no hemos aprendido a reconocer.
