El café es más que un simple estimulante; es un “despertador” no solo para la mente, sino también para el sistema digestivo. Aunque pueda parecer una reacción molesta, también es una señal de que nuestro cuerpo responde y procesa lo que consumimos de manera eficiente.
Álvaro Fernández, un farmacéutico popular en redes sociales conocido como @farmaceuticofernandez, ha hablado de lo que realmente sucede en nuestro cuerpo después de tomar café y algunos alimentos. Lo más normal sería pensar que la comida ha bajado rápido pero no es así.

Estreñimiento
“Lo que estás expulsando en ningún caso es lo que te acabas de comer”
Explicación. El farmacéutico empieza aclarando que el paso por el tracto digestivo le lleva a la comida entre dos y cinco días: “Lo que estás expulsando en ningún caso es lo que te acabas de comer. Realmente es lo que lleva esperando varios días para marchar”, comenta.

Ganas de ir al baño
Reflejo gastrolítico. Se trata de una respuesta natural del cuerpo que provoca la necesidad de defecar poco después de comer. Este fenómeno es más notorio en algunas personas y puede explicar por qué, tras una comida (o una taza de café), sentimos urgencia de ir al baño: “Tu estómago está lleno libera ciertas hormonas que le dicen a tu colon que se tiene que se tiene que poner a trabajar. Pero claro, según lo que comas o bebas este reflejo lo estimula menos o lo estimula más”, termina diciendo Álvaro.
Mayor en algunas condiciones
- En bebés, este reflejo es muy fuerte y explica por qué suelen evacuar justo después de comer.
- En adultos, su intensidad varía; algunas personas lo sienten con más fuerza, especialmente aquellas con síndrome de intestino irritable.
- Alimentos grasos o bebidas como el café pueden intensificar este reflejo.