En el sistema educativo español, las matemáticas ocupan un lugar central desde la educación primaria hasta la secundaria. Sin embargo, cada vez más voces se alzan para cuestionar la utilidad de ciertos contenidos tradicionales que, aunque forman parte del currículo desde hace décadas, hoy parecen alejados de las necesidades reales de los estudiantes.
Eva Matsa es una maestra con presencia en TikTok que ha publicado un vídeo reflexionando sobre la utilidad de este tipo de enseñanzas en la educación actual: ”¿En qué estamos haciendo perder el tiempo a los niños en el aula? ¿De verdad no hay cosas más importantes que esto?”, empieza diciendo.

La corporeidad, la mirada, la palabra y las tecnologías digitales deberían estar muy presentes los maestros en formación de los grados de Educación universitarios
“Me parece muy inútil hacer este tipo de problemas, cuando podemos estar haciendo problemas de verdad”
Tablas de multiplicar. Matsa destaca que aprender las tablas de multiplicar no le aportó un entendimiento real sobre el concepto de multiplicación ni sobre su aplicación en la vida cotidiana. La experiencia solo se reducía a repetir mecánicamente hasta obtener la aprobación del profesor o la profesora: “Hasta muchos años después no entendí la relevancia de este conocimiento. Después de aprender, el uso de la calculadora se volvió algo común, lo que restó sentido a la memorización previa”, explica.

Juego de tabla de multiplicar
División. La llamada “división con cajita” es un método didáctico muy presente en las aulas de primaria españolas, donde se busca que los niños comprendan de manera más visual y ordenada el proceso de dividir. A través de un sencillo recuadro en forma de “L” invertida, el dividendo se coloca dentro de la caja y el divisor fuera, mientras que el cociente se va construyendo en la parte superior a medida que se realizan las restas parciales. La maestra plantea que este tipo de ejercicios no existen en la vida adulta y se pregunta si no existen contenidos más relevantes que enseñar a los alumnos.

Un niño frente a una pizarra con operaciones matemáticas
Problemas matemáticos clásicos. Se trata de los ejercicios que nos planteaban situaciones como la salida de trenes desde diferentes ciudades y la necesidad de calcular cuál llegaría antes a un destino común: “Jamás, jamás voy a conducir un tren. Jamás he ido a Marsella. No sé, no tengo ni idea de lo que va a tardar en tren, si tiene que coger un avión, si tiene que hacer un transbordo, es que no lo sé”, afirma.
Tecnología. Eva Matsa sostiene que actualmente, herramientas como Google Maps ofrecen soluciones inmediatas a este tipo de problemas. En su lugar, considera que sería más provechoso plantear problemas como interpretar un mapa del metro de Barcelona: “Me parece muy inútil hacer este tipo de problemas, cuando podemos estar haciendo problemas de verdad, contextos reales de los niños reales”, termina diciendo.