Ricardo Díaz, coach educativo: “Tu hijo tiene potencial para sacar buenas notas, el problema es que nadie le ha enseñado nunca a estudiar”

Educación

Muchos padres se preguntan por qué sus hijos, a pesar de tener capacidad y haber sacado buenas notas en otros cursos, ahora parecen sin ganas ni motivación para estudiar

Una joven estudiando

Una joven estudiando

Getty Images/iStockphoto

La falta de motivación entre los estudiantes no siempre responde a un déficit de capacidad o de esfuerzo. En muchas ocasiones, el verdadero obstáculo reside en el método de enseñanza: estrategias poco atractivas, contenidos alejados de la realidad del alumno o dinámicas que no despiertan curiosidad. La educación actual se enfrenta al reto de innovar en la forma de transmitir el conocimiento, entendiendo que aprender no es solo memorizar, sino conectar, experimentar y encontrar sentido a lo que se estudia.

Ricardo Díaz es un coach educativo que, a través de su canal de TikTok ha lanzado una poderosa reflexión: “Tu hijo tiene potencial para sacar buenas notas, lo sabes porque otros años ya lo ha hecho. El problema es que nadie le ha enseñado nunca a estudiar”, explica.

Lee también

Alberto Soler, psicólogo: “Tener el teléfono cerca afecta a nuestra capacidad cognitiva y de atención. Aunque no lo estés usando y esté con la vibración apagada”

Christian Jiménez
Un móvil cargando sobre la cama
Un niño preadolescente tiene problemas para acabar sus deberes y su madre la está ayudando

Un niño preadolescente tiene problemas para acabar sus deberes y su madre la está ayudando

Getty Images

“No necesitas hacer más resúmenes, tampoco ponerte a preguntarle la lección todos los días”

Obstáculo. Díaz asegura que el 90% de los alumnos sufren este bloque al llegar a casa después de las clases: “Llegan sin ganas de ponerse con las tareas y sin motivación por repasar”, comenta. Este parón es bastante más común de lo que padres y docentes imaginan.

Niña haciendo deberes

Niña haciendo deberes

Getty Images

No insistas. El coach asegura que forzar más resúmenes o interrogar a nuestro hijo cada tarde es algo que no aportará soluciones: “No necesitas hacer más resúmenes, tampoco ponerte a preguntarle la lección todos los días”, comenta. 

Hábitos sólidos. Convertir las tardes en un campo de batalla no suele ser recomendable. La clave está en enseñar a nuestros hijos a aprender. El problema es que los jóvenes crecen sin tener un acompañamiento que les lleve por el camino del conocimiento. 

Reflexión. Existen estudiantes poseen un gran potencial, pero carecen de la orientación necesaria para desarrollarlo. El talento, por sí solo, no siempre basta: se requiere la figura de un guía que motive, acompañe y trace un camino claro. En un sistema educativo cada vez más exigente, el papel de los docentes y mentores resulta crucial para transformar las capacidades latentes en logros concretos. Sin esa referencia, el riesgo es que habilidades valiosas queden ocultas, desaprovechadas o se pierdan en el desánimo.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...