La escritora y filósofa Hélène Cixous (Orán, 1937), detrás de obras como El tercer cuerpo (Interzona), en la que reúne anécdotas, reflexiones y conversaciones con otros pensadores, gana el Premio Formentor de las Letras de 2025.
El jurado –reunido en Valencia y constituido por Claudia Casanova, Víctor Gómez Pin, Marta Rebón, Marta Segarra y Basilio Baltasar, en calidad de presidente–, otorga este galardón “por la personalidad de su estilo y su intrépido sentido de la soberanía creativa”, además de por ”la amplitud de las disciplinas intelectuales que ha integrado en su numerosa y proteica obra y por la composición de una obra literaria que ha expandido la más ilustre herencia de la cultura europea”.
El acta la sitúa además como “protagonista y testigo del desamparo contemporáneo” y reconoce que “su sensibilidad y pericia narrativa le ha permitido revelar las más escondidas penurias de la experiencia humana”. Entre otros temas, recuerdan, “ha dado cuenta de las heridas abiertas por el exilio, el infortunio y el enigma de la adversidad”.
Nacida en la Argelia francesa, llegó a Francia en 1955. En Las ensoñaciones de la mujer salvaje (Horas y horas) retrata su infancia y adolescencia y la profunda huella que deja en su vida la labor de escribir y pensar. Algo que lleva haciendo desde hace décadas, pues cuenta con una extensa obra traducida a múltiples lenguas y formada por más de 80 libros, entre ficciones, teatro y ensayo, de gran influencia en el ámbito del postmodernismo y de la crítica feminista.
Sobre este último aspecto, el premio Formentor recuerda la contribución “decisiva” de Cixous a configurar “la conciencia de lo femenino, su lugar en las transformaciones de nuestro siglo y su emancipación de las inercias ciegas de la historia”. En 1974, tras ser nombrada catedrática de Literatura Inglesa de la Universidad de París, fundó el Centre d’Études Féminines et d’Études de Genre, que ofreció el primer programa de doctorado en estudios femeninos de Europa. En una entrevista a The Guardian, la autora remarcó sus principios al asegurar que “la mujer debe escribir sobre las mujeres y llevar a las mujeres a la escritura”. En la escritora brasileña Clarice Lispector encontró un ideal y reconoció que su trabajo provocaba en ella un efecto “fertilizador”.
Otra de sus especializaciones se centra en la obra del escritor irlandés James Joyce, a quien dedicó su tesis, El exilio de James Joyce o el arte de la sustitución. Ese mismo año, en 1969, publicó su primera novela Dedans, de evocaciones autobiográficas, con la que inició un periplo literario y filosófico que no deja de darle alegrías.
