Estos son los estrenos que llegan a las pantallas de cine este 16 de mayo:
Calificaciones
★★★★★ obra maestra
★★★★ muy buena
★★★ buena
★★ regular
★ mala
Lo que queda de ti ★★★★✩
Dirección: Gala Gracia
Intérpretes: Laia Manzanares, Ángela Cervantes, Anna Tenta
Producción: España, 2025. 91 m. Drama
Tata mía
Por Salvador Llopart
Todo apunta a que el futuro del cine está en el campo. Un cierto nomadismo rural ha invadido buena parte de la producción española más significativa de los últimos años, con títulos como Alcarràs (2022) y Lo que arde (2019) y también As bestas (2022) y Suro (2022). Películas que comparten un paisaje, como si la idea de una España vaciada se hubiera apoderado del imaginario cinematográfico, convertido en un reflejo –en un espejo– de la verdad que no encontramos en nosotros, seres desplazados, de ciudad, deseosos de otros horizontes menos broncos. Lo que queda de ti, el debut de Gala Gracia como directora, es un buen ejemplo de este neorruralismo cinematográfico, por llamarlo de alguna manera.
Una obra de emociones intensas con olor a tierra mojada y ovejas pastando, que capta de forma veraz el anhelo de regreso y la necesidad del duelo por lo que quedó atrás. No nos equivoquemos, sin embargo. Gala Gracia no mixtifica la vida rural. Domina en ella una mirada realista, nada bucólica, sobre lo que significa el contacto con la tierra. El marco rural lo pone el Pirineo aragonés que la fotografía de Michele Paradisi refleja con grandeza y sensibilidad. Nos habla de dos hermanas que se reúnen, tras la muerte del padre, para dilucidar el futuro de la propiedad familiar; dos “tatas”, como una llama a la otra, de circunstancias vitales muy diferentes. Una (Laia Manzanares) regresa a esa vida que hace mucho que dejó atrás. La otra (Ángela Cervantes), se ha quedado en el pueblo, a cargo de sus propios asuntos. La primera se niega a vender por nostalgia o culpa, como si buscara detener el tiempo. La segunda, la que se quedó, lo ve de otra manera. Piensa con realismo campesino en los esfuerzos inútiles de su hermana por preservar el pasado.

Las dos protagonistas en un fotograma de la película
Lo que queda de ti no va de enfrentamientos dramáticos y odios. Por el contrario, en ella todo es cotidiano, cotidiano, silencioso como el mismo campo. Un drama que avanza, más que a gritos, mediante susurros. Guiado por el pulso firme de una directora que sabe lo que quiere. Ambas actrices, Laia Manzanares y Ángela Cervantes, ayudan en el empeño. Soberbias las dos a la hora de transmitir dos visiones diferentes de la existencia. Sin olvidar que, ante todo, son dos hermanas que se quieren
Centaures de la nit
★★★★✩
Dirección: Marc Recha
Intérpretes: Lluís Soler, Montse Germán, Muntsa Alcañiz
Producción: España, 2024 (105 minutos). Drama
Excursión a Poblet
Por Jordi Batlle
Centaures de la nit, título de obvias resonancias fordianas, es una película tan esquiva y escurridiza que el primer obstáculo que pone en el camino, aunque solo para los forofos de las etiquetas, es su adscripción genérica. ¿Es un drama, una comedia, una cinta de aventuras sobre la búsqueda de un tesoro, una fantasía onírica, un western encubierto o una filigrana puramente experimental? Hay un poco de todo en este artefacto singularísimo, excitante y extraterrestre, filmado en el monasterio de Poblet en fascinante blanco y negro (magistral trabajo del director de fotografía Peter Zeitlinger, en un registro muy nórdico: Bergman o Dreyer) y protagonizado por un grupo de hombres ciegos que visita el lugar; curiosamente, también son invidentes los monjes: aquí solo ven los personajes femeninos.

Fotograma del filme de Marc Recha
Más que ceñirse a un argumento único, la película recrea una atmósfera hechizante donde lo trascendente y lo espiritual alternan con el humor (ya sea agrio, feroz, como los diálogos entre Lluís Soler y Muntsa Alcañiz, empapados de veneno, memorables, o distendido: Soler haciendo creer que busca tomillo para una sopa) y con la simple contemplación del cielo, los caminos, la roca… El monasterio y sus alrededores se erigen en protagonistas con tanto o más peso que el del grupo de ciegos, al fin y al cabo la naturaleza y los espacios abiertos han sido, desde la ya lejana El cielo sube y pasando por Pau i el seu germà, Dies d’agost, Petit indi o La vida lliure, una constante en el cine de Marc Recha.
Apadrinada desde el más allá por el espectro de Luis Buñuel (la escena de los ciegos apaleando a la responsable de la excursión podría ser perfectamente un descarte de Viridiana), Centaures de la nit es una película concebida y ejecutada por Recha con una casi obscena libertad creativa. Contiene momentos de gran belleza, sin ir más lejos las imágenes, en primer plano y de carácter táctil, del agua, pocas veces retratada (y sonorizada) con tan cristalina pureza.
Ernest Cole: Lost and Found
★★★✩✩
Dirección: Raoul Peck
Producción: Francia, 2024 (105 min) Documental
Cruce de miradas
Por Philipp Engel
El dispositivo no acaba de estar a la altura de las fotos, muchas inéditas, del sudafricano exiliado Ernest Cole, a ratos apoyadas en material de archivo, que desfilan ante nuestros ojos. Las fotografías son, eso sí, impresionantes, y el discurso que conforman sobre ese racismo que vuelve con fuerza, sobrecogedor.

Fotograma del documental de Raoul Peck
Lo que más hondo se queda clavado en la mente del espectador son las miradas a cámara de todos los blancos que Cole sorprende en la calle, en uno u otro continente. No es sólo que les fotografíen sin permiso, es porque lo hace un hombre negro.
El instinto ★★✩✩✩
Dirección: Juan Albarracín
Intérpretes: Javier Pereira, Fernando Cayo, Eva Llorach
Producción: España, 2024 (92 min). Thriller
El método canino
Por P. Engel
Cine de guerrilla, bajo presupuesto. Apenas una localización, tres actores y una premisa con gancho: arquitecto contrata a un adiestrador de perros para que le quite su fobia a salir de casa.

Fotograma de la película de Juan Albarracín
La cámara se mueve bien, y el prometedor realizador combina la imagen con otra más enrarecida, que evoca el traumático pasado, y con documentales de adiestramiento canino. Más allá del duelo interpretativo y del interesante dispositivo, la trama transita de lo previsible a lo inverosímil, sin lograr sacarnos del déjà-vu.
Jane Austen arruinó mi vida
★★★✩✩
Dirección: Laura Piani
Intérpretes: Camille Rutherford, Pablo Pauly, Charlie Anson
Producción: Francia, 2024 (94 min). Comedia romántica
Escribir o no escribir
Por P. Engel
Original intento de hibridar la comedia romántica francesa y británica a partir del culto a la escritora del título, aunque más que subvertir los clichés, los perpetúa. Destaca empero la calidad de la imagen y un certero trasfondo en lo que respecta a los escollos de la creación literaria. Sabio consejo el que le da un aspirante a Hugh Grant a la amélie-ense librera de Shakespeare & Co: “Hay que escribir a partir de las ruinas”. Es decir, no tirar los textos a la papelera, sino trabajarlos una y otra vez.
El cuento del lobo ★★✩✩✩
Dirección: Norberto López Amado
Intérpretes: Lucía Jiménez, Paco Tous, Daniel Grao
Producción: España, 2025. 93 m. Comedia
Derrapaje inminente
Por S. Llopart
Aroma teatral para una miniatura que avanza mediante malentendidos y verdades a medias. Dos personajes centrales –hay más, pero cuentan poco– son suficientes. Un matrimonio separado, encarnado con vis cómica por Paco Tous y Lucia Giménez, despellejándose mientras se preocupan por la hija desaparecida. La mansión donde transcurre casi todo es suficiente para una comedia cuyo mayor interés recae del lado de la sorpresa inminente, con exceso de curvas en el camino hacia la verdad y el consiguiente peligro de derrapar.
Tras el verano ★★✩✩✩
Dirección: Yolanda Centeno
Intérpretes: Alexandra Jiménez, Juan Diego Botto
Producción: España, 2025 (94 minutos). Drama
Conflicto familiar
Por J. Batlle
Una pareja se separa. El hijo es de él, pero ella lo quiere como si fuera su verdadera madre y ahora teme perderlo para siempre.

Alexandra Jiménez en un momento del filme
Un conflicto familiar como tantos deben darse cada día en todas partes, planteado en un filme con ínfulas de tesis, con personajes estereotipados, situaciones dramáticas tópicas y una fastidiosa inclinación por demostrar antes que por mostrar. Se salva del naufragio Alexandra Jiménez, que para el melodrama es tan buena como para la comedia alocada.