Lo que es mío, el debut del brasileño José Henrique Bortoluci (Jaú, 1984) es un libro de ires y venires, de carreteras, de trayectos interminables no exentos de obstáculos y barreras –el término lodazal lo dice todo–. Bortoluci, que es profesor de Sociología en Sao Paulo y que se formó tanto en su país como en Estados Unidos, indaga en la vida de su padre gravemente enfermo, camionero desde los veintidós años, y paralelamente en la historia de Brasil.
La esfera privada, familiar, cercana, y la pública y social de un territorio que ha sufrido los azotes de la violencia y del despotismo de sus gobernantes (“la encarnación de nuestra barbarie”, escribe para referirse a Jair Bolsonaro sin nombrarlo) están en el centro de la escritura.
El hijo universitario, que se ha desclasado, conserva sin embargo el vínculo con los orígenes y sabe que su propio lenguaje es heredero de aquel caldo de cultivo: “Solo podemos hablar nuestra propia lengua cuando ajustamos cuentas con la lengua de nuestros padres”.
Esa migración social, que han vivido y explicado otros autores mencionados en estas páginas como Annie Ernaux, Tove Ditlevsen o Édouard Louis, se convierte con el tiempo en una férrea responsabilidad protectora hacia los progenitores. La mirada de Bortoluci al padre es la de quien quiere dejar constancia de forma precisa y descriptiva, sin voluntad de enmascarar o embellecer condicionado por la filiación –así fueron las cosas y así las transcribo–, pero siempre amable y comprensivo.
Cubierta de 'Lo que es mío'
Conocemos al padre del autor a través de los recuerdos de la infancia y de las palabras recogidas en grabaciones transcritas recientemente, en tiempos de pandemia y en el periodo de incómodos tratamientos médicos. El sociólogo brasileño retrata al padre, verdadero objeto de estudio, y lo enmarca en el devenir de un país marcado por la pobreza, las migraciones, la dictadura militar o la depredación del medio natural. Apoya sus análisis con datos y referencias a otros autores.
“Al igual que los árboles, los cuerpos en la Amazonia no dejan de caer”, escribe para referirse a las matanzas de indígenas y a las de misioneros en zonas rurales.
Se duele el autor de que el mundo de los camioneros no ha sido recogido en relatos ni representaciones artísticas, solo en registros populares.
La forma de abordar este libro es una contribución a llenar ese hueco. Despiertan mucho interés las odiseas del padre al volante para hacer llegar una mercancía a tiempo.
La escritura combina poesía, testimonio personal -en las palabras del padre–, y crítica social de forma creciente. Recoge también el proceso de envejecimiento y de deterioro del padre con un cuerpo marcado por las cicatrices y las dolencias (“el evento cáncer”) incidiendo en cómo también en ese terreno el componente racial y social importa.
Lo que es mío es un libro sólido pese a la brevedad, intenso, personal y social, en el que se alza una voz cuidada que clama por un progreso en favor de la humanidad, no en su contra.
José Henrique Bortoluci Lo que es mío Traducción de Antonio Saéz Delgado Random House 144 páginas 18,90 euros
