Primero fue el Big Four de la Premier League formado por los clubs con más títulos y talento de la Liga inglesa: Manchester United, Liverpool, Arsenal y Chelsea. A partir del 2012 se incorporaron el Manchester City, que había sido adquirido por el jeque dueño del fondo Abu Dahbi United Group en la temporada 2008-2009, y el Tottenham, por su creciente poder financiero y sus resultados. Hoy en día aún es el Big Six , formado por los principales equipos de fútbol ingleses agrupados en esa denominación que tuvo éxito en otros deportes. Como el tenis. La trilogía más triunfadora de la historia con Nadal, Federer y Djokovic pasó a denominarse el Big 3 . Y ahora, con la consagración de Alcaraz y Sinner, ya se está en el Big 2 . Pero con la exhibición de Carlos ante el italiano en Nueva York es muy posible que se esté asistiendo al nacimiento del Big One .
Carlos Alcaraz besa el trofeo de campeón del US Open
Los datos apuntan en ese sentido: Alcaraz ha ganado a Sinner en 10 ocasiones de 15 enfrentamientos, 7 de los últimos 8, 4 de 5 en esta campaña. El murciano suma 22 títulos profesionales en 29 finales y se impone en los Grand Slam a pares (dos US Open, dos Wimbledon y dos Roland Garros). Solo perdió una final hace unos meses en la hierba londinense frente al italiano.
Alcaraz fue muy superior a Sinner en Nueva York gracias también a la gran mejora en su servicio
Sinner felicitó al equipo de Alcaraz en su discurso post derrota elogiando que habían preparado bien el partido. También agradeció el trabajo y esfuerzo a sus técnicos, aunque quedó en el aire si las palabras de Sinner fueron una dulce crítica. El tenista italiano, que compitiendo parece más austríaco, no tuvo opción en la pista de Queens, ante la atenta mirada de Trump e ilustres personajes norteamericanos que desfilaban por las pantallas del estadio. Sinner siempre había sido el más táctico, frente al Alcaraz más mágico; el más frío ante el Carlos más eléctrico; el más constante mientras el español daba golpes de genialidad. La nieve y el sol. El Tirol y Cádiz. Pero en Nueva York, no tuvo opción. Alcaraz tomó la iniciativa en el primer juego (lo que quería su entrenador Juan Carlos Ferrero) y dejó sin capacidad de reacción a un Sinner sorprendido por la gran mejora en el servicio de Carlos. Esa fue una de las diferencias de los últimos enfrentamientos.
El español, gran restador, siempre sufría los servicios de Sinner, ahora ha sido el italiano el que ha padecido la progresión de Alcaraz en el saque. Que el último punto del partido fuera de servicio (Ace) fue como dejar un simbolismo final. En lo que más fuerte siempre había sido Sinner, ahora lo era Carlos. La evolución ha sido evidente. Por eso no es una fantasía decir que del Big 3 se pasó al Big 2 y en estos momentos es muy posible que se esté delante del Big One : Carlos Alcaraz, el número uno, el mejor tenista del mundo en la actualidad, sin discusión.
