Tras un intenso verano de obras en el Spotify Camp Nou con el permiso del Ayuntamiento para alargar el tercer turno de trabajo nocturno hasta mediados de septiembre y los correspondientes cambios de licencia por parte del Ayuntamiento para favorecer un primer regreso con 27.000 espectadores, Montjuïc vuelve a aparecer en el horizonte por tercera temporada consecutiva.
Para poder reabrir el Camp Nou el 14 de septiembre, en la cuarta jornada liguera ante el Valencia, con 27.000 espectadores, el club preveía firmar el certificado de fin de obra (CTO) la semana pasada. No ha sucedido y antes del 28 de agosto el Barça debe inscribir un campo alternativo para disputar tanto LaLiga como la Champions.
Como viene informando este diario, siempre se pensó en el Estadi Olímpic Lluís Companys. Ahora, tal y como adelantó Mundo Deportivo, fuentes del club confirman a La Vanguardia que ya han firmado con Barcelona Serveis Municipals (BSM) un convenio para la utilización de Montjuïc hasta finales de febrero. De esta manera, quedarían garantizados los cuatro partidos que el Barça disputará como local en la fase de grupos de la Champions.
Montilivi, una alternativa para el partido del día 14 de septiembre
De cara al estreno liguero contra el Valencia existe, sin embargo, otro imponderable: la montaña olímpica acogerá el concierto de Post Malone el 12 de septiembre, lo que obligará al club a buscar un escenario alternativo ya que finalmente el rapero americano ha vendido muchas entradas y no se contempla trasladarle al Palau Sant Jordi. La opción del Johan Cruyff no se contempla, ya que no dispone de VAR ni cumple con el aforo mínimo de 8.000 espectadores exigido en Primera División. Fuentes del club recalcan que no se contemple disputar el partido a puerta cerrada en el Camp Nou y no descartan Montilivi, estadio del Girona, como posible alternativa, ya que el conjunto de Míchel juega en Balaídos ante el Celta esa jornada.
Todo después de un intenso verano en el que el club anunció el regreso al estadio para el Gamper que finalmente se celebró en el estadio Johan Cuyff el pasado 10 de agosto ante el Como. Poco después, el club recibió una notificación del consistorio en la que se autorizaba una modificación en la licencia de obras y actividades, con el objetivo de abrir el estadio con un aforo inicial de 27.000 espectadores, ubicados entre el gol sur y la tribuna, y no los 60.000 inicialmente previstos.
Esta modificación no aseguraba, sin embargo, que el Camp Nou pueda abrir sus puertas para el primer partido de Liga que el Barça jugará como local ante el Valencia, el 14 de septiembre, ya que antes de la reapertura deben completarse cinco pasos, cada uno con sus respectivas revisiones, que requieren al menos un mes de margen.
El primero es la entrega del certificado de finalización de la primera fase de las obras. Tras este paso, el club debe presentar un certificado emitido por la Entidad de Certificación de Empresas Instaladoras Autorizadas (ECA), que garantice que las instalaciones eléctricas cumplen con la normativa y pueden funcionar de forma segura. Solo entonces el Ayuntamiento podrá realizar una inspección en el estadio. Finalmente, será necesario que Protección Civil, los Bomberos y la Guardia Urbana elaboren sus informes y protocolos para conceder los permisos de apertura con aforo.

El nuevo Spotify Camp Nou
Tres semanas después de producirse este cambio de escenario, aún no hay ningún documento del Barcelona y Limak que certifique el final de las obras. Por ello, desde el club transmiten que la normativa de LaLiga y de la UEFA exige que, en el caso de estadios propios en obras, se inscriba un campo alternativo antes de que finalice el mes de agosto. En el caso del Barcelona, esa sede provisional será, por tercera temporada consecutiva, el Estadi Olímpic Lluís Companys. También para la Champions y la UEFA, que debe visitar la semana que viene el estadio en obras.
En cualquier caso, más allá de la primera fase, con capacidad para 27.000 espectadores, los planes autorizados por el Ayuntamiento prevén que, siguiendo los mismos cinco pasos mencionados, el club pueda ir reabriendo más zonas del estadio en dos subfases más: La fase 1b, que incorpora el lateral, lo que elevaría el aforo a 45.000 espectadores, y la fase 1c añadirá el gol norte, completando los primeros 60.000 asientos. La fase 2, prevista inicialmente para dentro de un año, contempla la construcción de la tercera gradería, que permitirá alcanzar la capacidad final del estadio: casi 105.000 espectadores.