La selección de Marruecos, una de las revelaciones del Mundial tras pasar primera e invicta la fase de grupos, ha despertado una gran expectación en su país, pero también en Qatar, donde se han desplazado decenas de miles de marroquís para intentar presenciar en directo el partido de octavos de final contra España. Los hinchas de los 'leones del Atlas' serán sin duda mayoría en las gradas del estadio Ciudad de la Educación, que tiene capacidad para 44.667 espectadores. Los más afortunados han conseguido una de las preciadas entradas para el duelo contra 'la roja', algunas de ellas repartidas de manera gratuita en la embajada del país magrebí en Doha. Ante la gran demanda, la Federación marroquí consiguió el pasado domingo otras 5.000 entradas, pero serán insuficientes para abastecer a la marea marroquí desplazada a Qatar. "Podríamos llenar varios estadios. Hay locura en Marruecos con el partido", dijo en la previa de octavos en seleccionador marroquí, Wahid Regragui. Las banderas y camisetas de Marruecos están presentes en las calles de las ciudades de Doha, también en el metro y en los aledaños de los estadios. Además, a la numerosa afición de los norteafricanos se suma el apoyo de los hinchas locales, puesto que Marruecos es el único país de cultura islámica que sigue en liza en el Mundial. La expectación es máxima para una selección de Marruecos que ante España jugará por segunda vez los octavos de final de un Mundial. La primera vez fue en la edición de 1986 en México, donde también pasó como primera de su grupo y posteriormente cayó en octavos por la mínima ante Alemania (0-1). Por su parte, los pupilos de Luis Enrique llegan al partido como favorita, pese a las dudas surgidas en la derrota ante Japón, y contará con unos 5.000 aficionados en las gradas que deberán hacerse oír para contrarrestar a la mayoritaria hinchada marroquí, también muy presente en las calles españolas. En España residen 776.000 marroquís, que es la comunidad extranjera más amplia en tierras españolas.
