Raducanu se une al público para reclamar a la juez de silla que eche del estadio a un bebé que lloraba durante su partido contra Sabalenka

Tenis

La tenista británica acabó perdiendo su duelo con la número uno del mundo en el Open de Cincinnati

Horizontal

Emma Raducanu, durante su partido contra Aryna Sabalenka en Cincinnati 

Aaron Doster / Reuters

El épico partido había llegado a su último set después de casi tres horas de juego. La británica Emma Raducanu, de 22 años, había puesto contra las cuerdas a la número uno del mundo, la bielorrusa Aryna Sabalenka, el lunes en el Open de Cincinnati. Perdió por un ajustado 7-6 en la primera manga y se adjudicó la segunda por 6-4.

Raducanu se disponía a sacar cuando un intenso ruido quebró su calma. El llanto de un bebé que estaba en la grada la sacó de sus casillas. La tenista se alejó de la línea de fondo y le lanzó a la jueza de silla un contundente mensaje: “Han pasado como 10 minutos”

“Es un niño ¿Quieres que lo saque del estadio?”

“Es un niño”, respondió la árbitro con incredulidad. ”¿Quieres que lo saque del estadio?”. Emma Raducanu se encogió de hombros y se secó el sudor con la toalla mientras el público gritaba ”¡Sí!”. Luego, sonriendo, los señaló en señal de aprobación. El tenis es uno de los pocos deportes en los que se espera que el público guarden silencio durante los puntos.

La campeona británica, que hace un par de semanas que entrena con Francis Roig, extécnico de Rafa Nadal, había comenzado el encuentro con mucho ímpetu. Le rompió el servicio a Sabalenka en el segundo juego, pero no pudo mantener el suyo. El primer set se le escapó en el tie break, pero pudo resarcirse en el segundo.

Este era el segundo enfrentamiento del año entre Emma Raducanu y la estrella bielorrusa después de que la número uno del mundo se alzara con la victoria en su encuentro de tercera ronda en Wimbledon hace un mes. En el momento crucial del partido en Cincinnati, la tensión había alcanzado las cotas más altas.

En el octavo juego del decisivo set final, un juego que incluyó 13 deuces, Raducanu se distrajo con los ruidos de la grada mientras luchaba por mantener su servicio. Se había puesto 40-15, pero Sabalenka logró salvar la situación y amenazaba con el punto de break.

Un juego que llegó a los 13 'deuces'

Tras desperdiciar la sexta oportunidad de mantener su saque, la joven jugadora se preparaba para sacar de nuevo, pero se detuvo por el llanto del niño, iniciando el rifirafe con la jueza de silla. “Puedo pedirle (al bebé) que se retire”, concedió la arbitro a la tenista británica, “pero tenemos que continuar por el momento”.

El estadio estalló en fuertes aplausos y vítores, más preocupados los aficionados por seguir disfrutando del espectáculo deportivo que por el posible malestar del pequeño protagonista involuntario de la situación. El partido se reanudó con Emma Raducanu sufriendo con sus primeros servicios, pero manteniendose en la lucha.

Horizontal

Sabalenka y Raducanu se abrazan después del partido 

Matthew Stockman / AFP

Salvó un punto de break, luego otro e incluso un tercero. En el cuarto, Sabalenka lanzó un resto de derecha que puso a su rival a la defensiva con un revés cortado. El intercambio de golpes termina con la bielorrusa mandado una bola larga y envogiendo los hombros mientras el juego se acerca a su undécimo empate.

En el decimotercer deuce, y con un juego que se ha alargado ya hasta 23 minutos, Emma Raducanu fue capaz de llevarse el triunfo momentáneo con un primer servicio a la T que Sabalenka pudo conectar con la raqueta pero que no logró superar la red. Pese a los llantos del bebé, la británica celebra el punto con emoción, cerrando el puño y mostrando una desafiante mirada.

Fue una victoria momentánea, porque el duelo acabó decantándose del lado de Aryna Sabalenka, que en octavos de final se enfrenta a la española Jessica Bouzas, que derrotó a Taylor Townsend el lunes por la mañana.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...