José Elías, empresario multimillonario de 49 años, asegura que el mercado es implacable y altamente selectivo. “El mercado es muy inteligente y en el momento que llega una crisis solo aguanta el mejor”, afirma, destacando que la capacidad de adaptación y la calidad de tu producto o de lo que haces son determinantes para sobrevivir en tiempos difíciles.
Cuando hay una crisis, solo los mejores resisten
La importancia de ofrecer un servicio de calidad
José Elías explica que, en épocas de bonanza, cualquier producto o servicio puede parecer suficiente, pero cuando surge una crisis, los consumidores se vuelven más exigentes. “En el momento que viene una pequeña crisis, solo aguanta al mejor. Entonces tú puedes, durante un momento donde todo vale, hacer lo que sea”, señala, recordando que la selección natural del mercado premia la excelencia.
El empresario ejemplifica esta situación con la hostelería: durante periodos de auge, cualquier local puede atraer clientes, incluso si el servicio no es óptimo. “Pones ahí un tío que no tiene ni puta idea de servir una copa y la sirve, bueno, te irás más o menos contento”, explica, subrayando la tolerancia temporal del mercado hacia la mediocridad en épocas de abundancia.
Sin embargo, la dinámica cambia drásticamente ante la crisis. “En el momento que te aprieta el zapato, viene una crisis, y la gente selecciona dónde puede ir, pues solo va al mejor. Solo sobreviven los mejores”, advierte, enfatizando que la competencia se intensifica y que la calidad se convierte en el factor decisivo para mantenerse a flote.
José Elías, presidente de Audax Renovables
Elías relata que incluso inversores ajenos a un sector pueden verse sorprendidos por esta realidad. “Yo he visto inversiones de gente de fuera del sector que los han engatillado con el tema del típico local de moda de Madrid, de Barcelona y tal, mal llevado, porque al final sí, está muy bonito el local, pero luego vas y te comes una patata frita y está fatal”, cuenta, ejemplificando cómo la apariencia y el marketing no sustituyen a la excelencia real en el servicio o producto, y que para que tu negocio tenga éxito tienes que ofrecer un producto y servicio de calidad.
Con estas reflexiones, José Elías viene a decir que la supervivencia en el mercado no depende de la fortuna ni de la apariencia, sino de la capacidad de ofrecer calidad consistente, y únicamente quienes mantienen los estándares más altos pueden resistir las crisis y consolidarse en un entorno competitivo.

