Se acumulan los días negros y los números rojos. Los mercados agravaron este viernes su espiral negativa del jueves, con otro día para olvidar. En dos sesiones, con un retroceso acumulado de casi el 10%, Wall Street se ha fundido más de cuatro billones de dólares. Las bolsas estadounidenses, con sus tres indicadores bajaron por encima del 5%, han vuelto a los niveles de abril del año pasado, cuando Joe Biden todavía era presidente. Todas las ganancias del 2025 se han esfumado. La relación de Trump con la bolsa es menos idílica de lo que se pueda pensar: las ocho mayores caídas del Dow Jones de la historia en puntos han tenido lugar bajo su presidencia (en sus dos mandatos).
En España el Ibex 35 cedió un 5,8%, su peor sesión desde la pandemia, en junio del 2020. Por momentos se rondó el 7% de caída. En Europa la banca quedó perjudicada, con caídas que superaron el 10%. Los mercados temen que una recesión global minaría su negocio por el incremento de la morosidad. Además, en caso de recesión esto podría llevar a los bancos centrales a reducir tipos, algo negativo para su rentabilidad.
Trump, con la “gold card”, la nueva tarjeta de residencia de pago (Uncredited / Ap-LaPresse)
El Ibex 35 sufrió por el peso que tiene la banca: BBVA, Sabadell, CaixaBank, Santander... Todas las entidades al completo llegaron este viernes a retroceder en algún momento más del 10%.. En el EuroStoxx, París, Frankfurt o Londres anotaron descensos del 4%. Milán se descolgó con un desplome del 6,5%, la peor de las grandes plazas, por el peso de la banca.
JPMorgan prevé recesión en EE. UU. Este año por el impacto de los aranceles
JPMorgan Chase & Co. Ha revisado a la baja sus previsiones económicas y ahora anticipa que la economía estadounidense entrará en recesión este 2025, tras incorporar el efecto de los aranceles anunciados esta semana por la administración Trump.
Según una nota enviada a sus clientes, el economista jefe del banco para EE.UU., Michael Feroli, estima que el Producto Interior Bruto (PIB) real caerá un 0,3% en el conjunto del año, medido en términos interanuales del cuarto trimestre (4T/4T). La previsión anterior apuntaba a un crecimiento del 1,3% bajo ese mismo criterio.
“La contracción prevista de la actividad económica afectará al empleo y, con el tiempo, podría elevar la tasa de paro hasta el 5,3%”, advirtió Feroli.
“Con las empresas sin saber si deben tomar decisiones ya o no, la situación empeora cada día que pasa sin claridad. Si no se alcanzan acuerdos rápidamente en las negociaciones bilaterales, podría resultar difícil reparar el daño que Trump está causando”, apunta Vincenzo Vedda, director de inversiones de DWS.
La duda es si Donald Trump va a mantener los aranceles o si accederá a negociaciones
“Tened en cuenta que nunca cambiaré mi política”, aseguró este viernes el presidente estadounidense antes de irse a jugar a golf en Florida. Este es un punto clave para los inversores. Por ejemplo, los ojos del mercado están puestos sobre Europa, a la espera de sus represalias comerciales, en la estela de las anunciadas por China.
Olivier Blanchard, el execonomista jefe del FMI, sugería que si Trump no va a cambiar de idea, entonces mejor que Bruselas no haga nada y se busque otros mercados alternativos para los productos europeos. Pero todo indica que la UE va a reaccionar, con lo que las tormentas en los mercados pueden seguir. “El mercado está desangrándose, ya que la escalada de la guerra comercial podría llevar a la economía estadounidense a una recesión”, resume Luca Paolini, de Pictet AM. “El daño ya está hecho, a menos que Trump dé marcha atrás”, dice. ¿Lo hará?
“Pocos en el mercado creen que Trump vaya a dejar los aranceles en estos niveles. Su objetivo es negociar: evitar el tránsito de bienes entre Vietnam y China, limitar la inmigración de México, obligar a la UE a pagar su defensa, etcétera...” Comenta Jaume Puig, director general de GVC Gaesco. “Por otra parte, también hay que contextualizar lo que está ocurriendo estos días. Se está dando una rotación de carteras, porque las bolsas estadounidenses ya eran caras. Asimismo, no estamos en los años treinta, el 70% de la economía mundial son servicios, las repercusiones pueden ser contenidas. Y tampoco las empresas con las que hablamos se van a aventurar a desplazar sus plantas productivas de un día para otro”, comenta.
Los mercados financieros mundiales están reaccionando a los “aranceles recíprocos” de Trump
El objetivo económico último de la Casa Blanca es forzar, con esta corrección bursátil y tal vez hasta con una recesión, un recorte de los tipos de interés que abarate el coste de la deuda, justo cuando EE.UU. Tiene que refinanciar su enorme endeudamiento.
Wall Street vuelve a los niveles de la pasada primavera, cuando Joe Biden era presidente
Sin embargo, Jerome Powell, el presidente del banco central norteamericano, alertó este viernes que las tarifas de Trump aumentarán la inflación (además de que habrá una ralentización del crecimiento). Con lo que la rebaja del precio del dinero tal vez se haga esperar. Otro enemigo para el presidente de EE.UU. Uno más.



