La Fundación La Caixa destinará 4.000 millones de euros a obra social hasta el año 2030, según el Plan Estratégico 2025-2030 presentado este miércoles. El objetivo es “impulsar la transformación social” con la ampliación de “su radio de acción para responder a los nuevos retos sociales”. El gasto se dividirá en tres grandes ejes estratégicos: “social, investigación y becas, y cultura”. El ámbito social será el más importante puesto que concentrará alrededor del 60 % del presupuesto anual, según explicó la fundación en un comunicado.
El presupuesto diseñado en el plan contempla que La Caixa pasará de destinar 655 millones este año a los 800 millones en el 2030, un 22% más. En este nuevo plan estratégico, la fundación quiere que el banco CaixaBank (que es el origen de todo el grupo) tenga un papel más preponderante en el conjunto de la actividad.
El plan llega después de los cambios en la dirección de Criteria que implicaron la salida de Ángel Simón, consejero delegado, fue sustituido por Francisco Reynés pero con el cargo de vicepresidente. Reynés mantiene la presidencia de Naturgy, una de las empresas participadas de Criteria.
En el plan, la Fundación ha querido dejar claro que la institución actúa junto con su holding de participadas Criteria “como un único grupo”. Según un comunicado, la hoja de ruta de la Fundación presidida por Isidro Fainé establece “la orientación estratégica de Criteria Caixa respecto al enfoque de la gestión de sus inversiones y las bases para el refuerzo de la gobernanza compartida entre el Patronato de la Fundación y el Consejo de Administración de Criteria Caixa”.
Para llevar cabo ese proyecto “Criteria Caixa adecuará en los próximos meses su Plan Estratégico 2025-2030 con el objetivo de que esté totalmente alineado con los principios que marca el plan de la Fundación”.
En cuanto el reparto de la obra social, “la Fundación estudiará abordar nuevas líneas de actuación, como la sostenibilidad ambiental, la salud mental y la longevidad, así como aumentar su influencia a escala internacional para dar respuesta a los retos globales compartidos”. Entre las inversiones previstas destaca “culminar la construcción de nuevos equipamientos clave” como el CaixaResearch Institute en Barcelona, un centro de referencia mundial de investigación especializado en inmunología de España. El presupuesto es de 100 millones de euros.
En un comunicado, Fainé destacó que la Fundación siempre ha sido una entidad independiente y se ha posicionado del mismo modo: “Manteniéndose fiel a sus principios y a su vocación de servicio a la sociedad y a las personas en situación de mayor vulnerabilidad”.
Otro de los puntos destacados del plan son impulsar a la Fundación La Caixa como un actor relevante a escala global. El objetivo es aumentar la capacidad de influencia de la entidad en el ámbito internacional.