El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado este lunes que a partir del próximo 1 de agosto se impondrán aranceles del 25% a los bienes importados desde Japón y Corea del Sur. Esta medida se enmarca en la frenética ofensiva comercial que ha lanzado en su segundo mandato para reformar la política estadounidense y presionar a las naciones que aún no han cerrado acuerdos bilaterales con su administración.
A través de cartas enviadas a ambos gobiernos y de un mensaje en su plataforma Truth Social, Trump advirtió de forma contundente que si estas naciones deciden tomar represalias y aumentar sus propias tarifas como respuesta, dicho incremento “se añadirá al 25% que nosotros cobramos”. El anuncio sobre estos dos socios asiáticos es el primero de lo que el presidente prometió que sería una “ráfaga” de cartas de demanda y acciones comerciales que se darían a conocer durante la jornada.
La decisión llega tras una tregua de 90 días durante la cual los llamados “aranceles recíprocos” se habían rebajado temporalmente al 10% para facilitar las negociaciones, después de que la Casa Blanca planteara inicialmente tasas del 24% para Japón y del 25% para Corea del Sur. Esta política de aranceles intermitentes se ha convertido en una constante fuente de incertidumbre para los mercados, los banqueros centrales y los ejecutivos, quienes enfrentan enormes dificultades para realizar planificaciones rutinarias sobre producción, inventarios, contratación, inflación y demanda del consumidor.
Aranceles del 25 al 40% a Sudáfrica, Malasia y otros diez países
El presidente estadounidense también advirtió este lunes a Sudáfrica, Malasia y otros diez países que a partir del 1 de agosto las importaciones desde esos países afrontarán en EE.UU. Aranceles que oscilan entre el 25 y el 40%.
En misivas individuales enviadas a los respectivos mandatarios y difundidas en su red, Truth Social, Trump precisa que los gravámenes para Laos y Birmania se sitúan en el 40%, en el 30% los de Sudáfrica y Bosnia y Herzegovina, en el 36% los de Camboya y Tailandia y en el 35 % los de Serbia y Bangladesh. Los de Indonesia se quedarían en el 32% y en el 25% los de Malasia, Kazajistán y Túnez.
El texto repite el mismo esquema y advierte a esas naciones que en caso de que estas decidan incrementar sus propios aranceles sobre los bienes estadounidenses, Washington sumará ese porcentaje al que acaba de anunciar.
El líder republicano comenta que esos aranceles “son necesarios” para corregir lo que a su juicio son años de políticas y barreras arancelarias que han provocado a Estados Unidos un déficit comercial en sus respectivos intercambios.


