El Sabadell puso este jueves encima de la mesa devolver a sus accionistas el equivalente al 40% del valor de sus títulos en tres años si se quedan en el banco y rechazan la opa del BBVA. En total, la remuneración se elevaría a 6.300 millones de euros. Es el último cartucho que ha disparado el banco catalán para tratar de frenar la aceptación de la opa que arrancará en el mes de septiembre.
Pese a las condiciones impuestas al BBVA por la CNMC y por el Gobierno y a la sorpresiva venta del TSB, la entidad que preside Carlos Torres sigue adelante invariable con su plan para absorber al Sabadell. En la rueda de prensa de presentación del plan estratégico 2025-2027 del Sabadell celebrado ayer desde Sant Cugat, el consejero delegado del Sabadell, César González-Bueno, defendió que es “perfectamente honorable” que el BBVA retire su opa porque “las condiciones han cambiando sustancialmente”. Según el directivo, los principales cambios de condiciones son que tras la evolución en bolsa, la prima por la compra es negativa en un -13,3% (con el cierre de ayer) y las sinergias esperadas no existirán hasta de aquí a unos años. El Gobierno ha prohibido que el BBVA pueda fusionarse con el Sabadell en un periodo de tres años ampliable a cinco y debe respetar no sólo la independencia patrimonial y jurídica sino también la independencia de la gestión. Por eso, González-Bueno insistió en que en los primeros años las sinergias serían cero.
El directivo pidió al BBVA que revele cual es su estrategia de remuneración al accionista para poder compararla con la del Sabadell al tiempo que afirmaba que aunque parece que el banco catalán está tirando la casa por la ventana, lo cierto es que no es verdad.
A pesar de que se esperaba con que el periodo de aceptación de la opa comenzara a principios de agosto, al final el BBVA ha optado por arrancar en septiembre. De esta manera, cuando comience el periodo ya se conocerá el resultado de las dos juntas del día 6 de agosto en las que se decidirá la venta del TSB y el reparto de un dividendo extra de 2.500 millones.
La entidad ganó 975 millones hasta junio, un 23,3% más
La presentación de ayer coincidió con la publicación de los resultados semestrales del banco en los que la entidad ganó 975 millones hasta junio, un 23,3% más. Sin tener en cuenta el TSB, el resultado fue de 804 millones.
En las últimas semanas se ha especulado con la posibilidad de que el BBVA se conformara con quedarse con el 30% del Sabadell y no con la mayoría de las acciones como prevé la opa. En opinión de González-Bueno “no hay precedente” de una compra de un paquete minoritario con intercambio de acciones. “Lo que contempla la legislación es que sí se puede hacer en efectivo” esa adquisición minoritaria, añadió. El directivo dijo que no ve posible que el BBVA se quede con el citado 30%.
Sobre la posibilidad de que salga adelante la opa, Gonzalez-Bueno dijo que es imposible en estas condiciones porque los accionistas perderían dinero más los costes fiscales. “El BBVA solo tiene dos opciones: o mejorar la oferta o desistir”, según González-Bueno.
Según detalló el Sabadell, el plan estratégico contempla que el dividendo por acción será en 2025, 2026 y 2027 superior a los 20,44 céntimos brutos abonados en 2024. Las previsiones del banco es que el beneficio se situará por encima de los 1.600 millones en 2027 ya sin TSB.
El banco prevé incrementar el saldo de crédito alrededor del 5% cada año, por encima del mercado. La entidad destaca que tras la venta del TSB su objetivo es centrarse en España como su escenario central de actividad a que es “un mercado predecible, estable y con una de las perspectivas macroeconómicas más positivas de la Unión Europea en los próximos años”.
Sobre los resultados del primer semestre, el consejero delegado declaró que el banco “seguirá creciendo de forma recurrente y sostenible en los próximos años