El Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública ha comunicado a los operadores de telecomunicaciones que ya ha finalizado el desarrollo de la plataforma telemática con la que podrán solicitar la autorización administrativa previa para la instalación de nuevas estaciones radioeléctricas 5G o si van a modificar una estación existente, cuando estas estén situadas en ubicaciones geográficas catalogadas como sensibles por cuestiones estratégicas o de seguridad nacional.
Este sistema estará disponible a partir del 1 de octubre y permite garantizar el cumplimiento de la legislación de seguridad nacional que obliga a los operadores a solicitar esa autorización previa desde 2015, pero que la falta de una solución tecnológica había impedido hasta ahora.
La ley marcaba desde 2015 la obligación de autorización previa telemática
Con la puesta en marcha de esta aplicación informática, España dispone de un marco más completo para garantizar la seguridad de las redes 5G y que, según han explicado fuentes del sector, “afianza un marco normativo que es uno de los más completos y garantistas que existen en la UE”.
De hecho, es generalizado el desarrollo de normativa específica ligada al despliegue de esta tecnología puesto que permite unas prestaciones mucho más avanzadas (desde el coche autónomo al control a distancia de industrias y fábricas) y, por tanto, la seguridad es mucho más relevante.
En ese despliegue es de especial sensibilidad la protección del núcleo de la red 5G (core) puesto que es considerado infraestructura sensible. Las investigaciones han demostrado que existen vulnerabilidades que permiten a ciberdelincuentes crear estaciones base falsas para interceptar comunicaciones, realizar ataques de phishing y rastrear usuarios entre otros objetivos.
A ello se suma el complicado contexto geopolítico y las crecientes tensiones entre los gobiernos occidentales y China agravadas tras las llegada de Donald Trump a la Casa Blanca. El despliegue diplomático de la administración americana pasa por giras oficiales por todos los países de su órbita, entre ellos los europeos, para advertir a empresas y Gobiernos de los riesgos de la tecnología china que califican diplomáticamente como “no confiable”.
En el ámbito público, EE.UU. subraya que el despliegue de las 5G debe ser competencia exclusiva de los Gobiernos y recomienda no dejarlo en manos de operadoras privadas.