La Comisión Europea ya prepara la maratoniana cumbre de ministros de Agricultura y Pesca de mañana jueves y el viernes que debe tomar una decisión fundamental para el sector pesquero: los días que los pescadores de arrastre del Mediterráneo podrán trabajar el año que viene. Lo que plantea Bruselas es mantener los días de faena actuales –que pueden llegar a un máximo de 130–, pero siempre y cuando el sector realice todavía más medidas compensatorias para asegurar la sostenibilidad de las especies. La propuesta de la Comisión –que todavía debe ser acordada con los estados miembros– es muy drástica. En realidad lo que la Comisión quiere es que se salga a pesca de arrastre 9 días (un 65% menos que los 27 actuales). Y se deja abierta la puerta a que, si se llevan a cabo medidas como cambiar las mallas, parar durante semanas o establecer puertas voladoras, se podrían no solo ampliar hasta 27 sino alcanzar los 130 de este año.
Para ello, Bruselas ahora propone nuevas medidas. Por ejemplo, impedir de forma permanente la pesca con arrastreros a profundidades inferiores a los seiscientos metros con el fin de proteger la gamba.
Si se impone la propuesta de reducción del 65%, la distancia entre el planteamiento inicial y los días a recuperar esta vez es más amplio, por lo que los esfuerzos de los estados miembros deben ser también mayores. Este año, sin embargo, los 130 días de tope pactados han terminado siendo incluso más tras el acuerdo del Gobierno con Bruselas para que los pescadores de arrastre salieran otros 13 días a faenar a fin de asegurar el abastecimiento durante las fiestas de Navidad.
Fuentes diplomáticas ya advierten que España se opondrá radicalmente a este punto de partida tan bajo, porque supone “esfuerzos adicionales para el sector, que ya ha hecho un esfuerzo enorme y que debe ser reconocido en el 2026”, así que la negociación se anticipa larga. España quiere que el acuerdo suponga reconocer todas las medidas compensatorias que ya han realizado durante los últimos meses los pescadores españoles, y no obligarles a realizar todavía más inversiones. “Vamos a pelear para que el esfuerzo que ha hecho
el sector se vea reflejado en los días de pesca en el 2026. No podemos pedirles cada año cosas nuevas”, subrayan estas fuentes diplomáticas.
La presidencia danesa de la UE pretende que la negociación se cierre el viernes por la tarde
Esta propuesta tan radical de la UE se debe, según la versión de los técnicos comunitarios, a que, aunque los científicos han determinado que ha habido una mejora –es decir, que los peces son más grandes y que su mortalidad por pesca está disminuyendo–, también la mayoría de las poblaciones siguen estando sobreexplotadas.
La presidencia danesa de la UE pretende que la negociación se cierre el viernes por la tarde, pero es posible que, como sucedió el año pasado, el acuerdo no se alcance hasta la madrugada o incluso se alargue al sábado. España volverá a intentar hacer frente común con Italia o Francia.

