Cuando La Charito Films ganó dos premios Goya con La Estrella Azul, muchos en la industria se preguntaron de dónde había salido esta productora. Lo que pocos saben es que su historia es la de un cambio de rumbo inesperado, una buena dosis de audacia financiera y una apuesta constante por el cine independiente.
El fundador de La Charito Films, Diego Rodríguez, no viene del mundo del cine, sino del financiero. Trabajó durante años como bróker en GVC Gaesco hasta que un amigo de la infancia, aspirante a director, consiguió convencerle para que financiara su película. El resultado fue un desastre: la productora cerró y él perdió todo su dinero y el de los inversores que participaron. Sin embargo, en lugar de darse por vencido, vio una oportunidad en el sector: el potencial de las deducciones fiscales en la financiación cinematográfica.

Diego Rodríguez, fundador de La Charito Films
En 2017, tras años de experiencia financiando proyectos de terceros, fundó La Charito Films. El nombre, que en un inicio generó cierto escepticismo, es un guiño a su juventud: “Con 17 años, tenía una Vespa a la que llamé así. Era un símbolo de libertad y de disfrutar del camino. Quise que mi productora tuviera ese mismo espíritu”, explica Rodríguez. Pero la verdadera clave del crecimiento meteórico de La Charito Films ha sido su capacidad para moverse entre el cine y las finanzas con una agilidad poco común en el sector.
El sistema que han perfeccionado es simple en concepto, pero muy efectivo: las películas generan deducciones fiscales, pero las productoras no siempre tienen suficientes beneficios como para aprovecharlas. La Charito Films encontró su hueco en el mercado vendiendo estas deducciones a empresas y autónomos, generando así liquidez para invertir en nuevos proyectos. “Al principio éramos de los pocos en el sector que veníamos del mundo financiero, así que crecimos muy rápido”, explica el fundador. Y los números lo confirman: en el último año, han financiado 70 proyectos.

Cartel de 'La Huella del Mal', el último estreno de La Charito Films
Invertir en cultura: una fórmula fiscal con beneficios asegurados
La clave de este modelo radica en los incentivos fiscales que ofrece la inversión en cultura. De acuerdo con los artículos 36 y 39.7 de la Ley 27/2014 del Impuesto sobre Sociedades, las empresas pueden beneficiarse de una rentabilidad mínima del 120% en forma de deducciones en su cuota tributaria.
Esto significa que cualquier empresa o autónomo con actividad económica puede destinar parte de sus impuestos a financiar producciones audiovisuales, teatro, música en vivo y otras expresiones culturales, obteniendo un retorno fiscal garantizado. No hay un mínimo de inversión, y además de la rentabilidad directa, este tipo de participación fortalece la reputación y la imagen corporativa de la empresa. Por ejemplo, si una empresa tiene que pagar 360.000 euros en impuestos y decide invertir 300.000 en una producción cultural, podrá aplicar una deducción de 360.000 euros, logrando una rentabilidad fiscal de 60.000 euros sin necesidad de un esfuerzo financiero extra.
Gracias a este modelo, La Charito Films ha podido coproducir películas como La mesita del comedor, un éxito del cine de género que Stephen King alabó diciendo que era “la peor pesadilla de los hermanos Coen”. Pero sin duda, su mayor sorpresa ha sido La Estrella Azul: “Era el primer largometraje del director y empezó ganando premios en San Sebastiány terminó ganando Goyas. Nunca imaginamos que llegaría tan lejos”.

El thriller protagonizado por Blanca Suárez y Daniel Grau se proyectará en el Festival de Málaga
A la hora de seleccionar proyectos, no siguen una fórmula cerrada. “No tenemos un criterio fijo, nos guiamos por lo que nos gusta y lo que creemos que podrá encontrar financiación en televisiones y plataformas”, cuentan. Su próximo gran estreno es La Huella del Mal, un thriller protagonizado por Blanca Suárez y Daniel Grau, se proyectará en el Festival de Málaga. “Es nuestra primera película grande, con un presupuesto de seis millones de euros, más del doble de la media en España”, explica Rodríguez. Rodada en Burgos, Navarra y Atapuerca, esta película de acción está basada en una novela de Planeta y dirigida por Manuel Ríos, conocido por su trabajo en Médico de familia y Compañeros.
El futuro de La Charito Films
Pero el cine no es su única apuesta de futuro. La Charito Films está en plena transformación en un grupo diversificado de entretenimiento. Han creado un holding que incluye asesoría legal y financiera especializada en cine, se han aventurado en la producción de espectáculos en vivo (como Love, Love, Love, dirigido por José Corbacho), y tienen planes para expandirse a la publicidad y las series. “Queremos ser un actor clave en el entretenimiento en España. Hay grandes grupos en el sector, pero la mayoría acaban vendiéndose a conglomerados internacionales”.
Con su combinación de olfato financiero y pasión por el cine, La Charito Films ha demostrado que, aunque no vengan de una saga de cineastas, han sabido hacerse un hueco a base de estrategia y películas que atrapan al público. Y todo apunta a que su historia de éxito solo acaba de empezar.
Más información
Web: https://lacharitofilms.com/
Teléfono: +34 930 245 107