Isabel Gemio desvela su lado más íntimo tras su expulsión en 'Bake Off': “Al padre de mis hijos le he perdonado, pero no olvido”

En las últimas semanas, Isabel Gemio ha estado muy presente en la televisión pública al ser una de las concursantes de Bake Off: famosos al horno. La presentadora fue una de las elegidas para realizar pasteles y galletas, entre otras cosas, y competir con el resto de sus compañeros para llegar lo más lejos posible.

Sin embargo, hace unos días se convirtió en la expulsada de esta semana, dejando atrás un espacio que le ha ayudado mucho en su vida, tal y como confesó ella misma. “Me ha enseñado paciencia, me ha enseñado que, a veces, hay que arriesgar en la vida. Yo necesitaba mentalmente salir de mi casa en el momento que lo hice. Me ha venido muy buen mentalmente”, desveló. Ahora, ha ofrecido una entrevista abordando más aspectos de su lado más privado.

Isabel Gemio siempre ha sido muy celosa de su intimidad. Tanto es así, que nunca ha llegado a abrirse del todo públicamente, separando su vida personal de la profesional. Pero parece ser que haber participado en el reality de repostería ha supuesto toda una catarsis para ella y ha concedido una entrevista para la revista Diez Minutos en la que ha hablado del padre de su hijo y de sus pretensiones en el amor, entre otras cosas.

Para empezar, no ha dudado en exponer que tardó “diez años en reaccionar” ante la enfermedad de su hijo, no pudiendo decir el nombre de esta en alto. “Si la hubiera fundado antes, llevaríamos más camino hecho”, ha confesado sobre la fundación que creó para “conseguir dinero para la investigación” de distrofias musculares y otras enfermedades raras.

Y es que a su hijo Gustavo le diagnosticaron distrofia muscular de Duchenne con tan solo 21 meses de vida. “Sus músculos nunca le permitieron correr ni jugar al fútbol y a los 12 años ya necesitó una silla de ruedas”, expuso hace un tiempo. Una enfermedad genética que provoca la degeneración progresiva de los músculos.

Pero si hay algo que le ha dolido en todo este camino es tenerlo que hacer sin la ayuda del padre de sus hijos, del que se divorció en 2006, tras 10 años juntos. “Al padre de mis hijos le he perdonado, pero no olvido”, ha confesado con seguridad.

Aun así, está más centrada en su papel como madre en la actualidad y no tanto en el pasado. Por ello, no ha dudado en dar las gracias a la novia de su hijo Gustavo, que lleva junto al joven ocho años. “A mí ningún hombre me ha durado tanto. A mi nuera la tengo en un pedestal, por cómo ama a mi hijo”, ha expresado en la mencionada revista.

Y hablando de vidas amorosas, también ha desvelado cuáles son sus pensamientos actuales a la hora de buscar una pareja. “Exijo mucho a un hombre para que me guste”, ha sentenciado, dejando claro que en estos momentos de su vida no quiere quedarse con cualquiera.