En las últimas semanas, Sheila Devil, la hija de Camilo Sesto, se encuentra en el foco mediático. Su estado de salud, tanto física como mental, es algo que preocupa mucho a su entorno. Hace unos días salió a la luz la noticia de que había sido detenida por la Guardia Civil de Galapagar, y además fue acusada de tráfico de estupefacientes. Tampoco ha pasado desapercibido su accidente en patinete. Todo esto ha provocado que muchos se pregunten si, en su estado, habrá podido gestionar la fortuna que le dejó Camilo Sesto tras fallecer. En las últimas horas, han trascendido algunos detalles sobre su gestión.
Una de las personas que peor lo está pasando en su entorno es Lourdes Ornelas, su madre. La mujer se encuentra totalmente desesperada, y trata de ayudar en todo lo que puede a Sheila, también en el aspecto económico. Es ella quien le gestiona las finanzas, supervisando todos los gastos económicos. Ahora se ha podido saber que, aunque Devil puede hacer uso de la herencia de su padre, no puede extraer grandes cantidades de dinero.
Sheila Debil en una imagen de archivo
De esta manera, es Ornelas quien gestiona el acceso al patrimonio de Camilo. Cabe recordar que a su fortuna se le suma todos los beneficios que el artista sigue generando tras su fallecimiento. Se trata de una suma de dinero que podría ascender a los 30.000 euros mensuales.
Pero eso no es todo. Ha sido este miércoles cuando Lecturas ha revelado que Sheila conserva todos los bienes que heredó de su padre, intérprete de temas como Perdóname o Melina. Una lista de propiedades que se traduce en un chalet y dos terrenos en Torrelodones, además de una espectacular casa en Marbella y otra en Las Rozas. Propiedades valoradas en una gran cantidad de dinero. Una posesión que preocupa a Ornelas, quien está haciendo todo lo posible para que su hija no desperdicie la gran herencia que ha recibido.
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A lo largo del último año, Lourdes se ha mostrado muy preocupada por lo que pueda sucederle a su hija. Se la ha podido ver angustiada debido a las compañías de Sheila, además de su visible deterioro de salud, especialmente a nivel mental. La mujer está haciendo todo lo que está en su mano para impedir que, como consecuencia, tome malas decisiones terminen por hacer que Sheila pierda todo lo que ha podido heredar de su padre, fallecido en septiembre de 2019.