Solo una semana después de una breve hospitalización por los efectos secundarios de su tratamiento contra el cáncer que le obligó a cancelar varios compromisos, el rey Carlos III ha mostrado su cara más amable uniéndose a una orquesta vegetal durante una recepción en el castillo de Windsor la noche del jueves. El monarca de 76 años asistió al encuentro, junto a unos 350 invitados, cuyo objetivo era reconocer a voluntarios que participan en la música comunitaria en el Reino Unido.
El momento más vistoso de la cita fue cuando el rey se unió a la London Vegetal Orchestra, un grupo de músicos que utilizan hortalizas para componer melodías y que se publicita como la única agrupación del Reino Unido que ofrece al público espectáculos “de cosecha propia”. Carlos III aprendió in situ a soplar a través de una zanahoria cortada que emitía un sonido similar al de una flauta e interpretó junto al grupo a ritmo de Twinkle, twinkle, little star.
“La London Vegetal Orchestra ofrece una exquisita selección de calabacines, pimientos, patatas, nabos suecos y calabazas moscadas, acompañadas de una impresionante selección de flautas dulces de zanahoria (todas locales y orgánicas), fabricadas por nuestro maestro flautista residente, Tim Cranmore”, afirma su página web.
El mismo día, Carlos III había acudido al 80.º aniversario de Flying 4 life, una organización humanitaria que apoya a comunidades que viven aisladas del mundo ofreciéndoles transporte aéreo en caso de emergencia. Allí asistió a la bendición de un avión destinado a dar apoyo a las regiones remotas de Papúa Nueva Guinea. Tras unos días de descanso en Highgrove House, su casa de Gloucestershire, el jueves fue una jornada corriente que despejó las dudas sobre la salud del monarca.
Carlos III la noche del jueves en el castillo de Windsor en una recepción para reconocer a voluntarios que participan en la música comunitaria en el Reino Unido.
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El monarca, diagnosticado de un cáncer no especificado en febrero de 2024, fue tratado en la London Clinic, el mismo centro donde fue operado y se le diagnosticó la dolencia. Tras la la hospitalización del, pasado jueves Buckingham insistió en que se trató de un hecho puntual en su tratamiento y que su lucha contra el cáncer sigue por buen camino.