Su nombre ha estado en boca de todos durante los últimos meses, y eso que en realidad son ya muchos los años que lleva Jesús Calleja en la primera línea mediática. Desde que en el 2007 se emitió Desafío extremo, la primera serie documental protagonizada por él mismo para las cadenas Cuatro y Energy, su presencia en la pequeña pantalla ha ido en ascenso.
Solo hace falta revisar otros programas que ha puesto en marcha, como Planeta Calleja, Volando voy o más recientemente Universo Calleja. Por no hablar de uno de los momentos culminantes de su trayectoria como aventurero, cuando el pasado febrero se embarcó en el viaje más extremo de todos los que ha hecho: subir hasta el espacio. Un hito, entre tantas otras travesías que forman un listado de destinos donde hay uno que se repite por encima del resto.
“Mi propósito era descubrir el mundo”
El cambio de vida que Jesús experimentó para poder empezar a viajar
Para conocer cuál es ese enclave al que el leonés ha acudido en reiteradas ocasiones a lo largo de su vida, es necesario ponerse en antecedentes. Esos que nos sitúan, en primer lugar, en su tierra natal, donde en realidad comenzó siguiendo los pasos de su familia y dedicarse al oficio de la peluquería. Y no se le daba nada mal.
Tan bueno era cortando el pelo que, a la edad de 23 años, consiguió alzarse con el primer puesto en el campeonato de España de peluqueros de Burgos, que se dice pronto. Un contexto de dicha, con muy buenas perspectivas de futuro en el terreno laboral, al que él mismo decidió echar el cierre. Así se lo confesó a Bertín Osborne en una entrevista para el extinto Mi casa es la tuya, donde señaló que “cuando más éxito tenía nuestra peluquería [llamada Hermanos Calleja] decidí cerrarla”.

Jesús Calleja en su época como peluquero.
¿El motivo que lo llevó a tomar una decisión tan drástica? “Mi propósito era descubrir el mundo”, refería entonces, para después apuntar al que, sin esperarlo, se convirtió en uno de los países más especiales de su relato de vida. “Me fui a Nepal, allí descubrí que quería ser guía de montaña”, explicó al presentador del espacio sobre este giro de guion que lo cambió todo.
“Decidí hacerme cargo de él”
Volvió a Haití muchas veces, y en una de ellas regresó con su hijo adoptivo
Tanto le gustó la experiencia que aseguraba que “he vuelto todos los años de mi vida desde esa primera vez”. Lo anterior, además de detallar que allí “estuve trabajando durante 16 años de guía” e incluso se gastó todos sus ahorros intentando “abrir negocios allí”. El caso es que, a pesar de que ahora a su regreso a España le esperaría el éxito en el plano mediático, el país milenario –por su rica historia y sus tradiciones ancestrales– sigue muy presente en su día a día.
Para comprenderlo, tan sencillo como referirse a la historia de la adopción de Ghanesh, mayor de sus hijos adoptivos. “En mis viajes a Nepal conocí a un chico que vivía en la calle y tenía tuberculosis. Decidí hacerme cargo de él y llevármelo a España para curarlo. Al final lo adopté”, narró también en la charla con el cantante de rancheras antes mencionada.