Hay hoteles que son más que un alojamiento lujoso. Establecimientos míticos repartidos por el mundo cuya fama traspasa, incluso, la de la ciudad en la que se asientan; son hoteles con alma de los que se oye hablar más allá de sus límites geográficos. Es el caso del hotel Valparaíso de Palma, que acaba de cumplir 50 años y desde hace una década entrega la distinción Mallorquines de Verano. La princesa Beatriz de Orleans, con una larga historia familiar de vinculación a la isla, donde ahora veranean sus hijos y nietos, recibió la distinción la noche del viernes, sumándose así a la nómina de ilustres visitantes que atesora el establecimiento.
En las habitaciones del Valparaíso se ha alojado una lista de personalidades que va de Farah Diba a Julio Iglesias, pasando por el rey Hassan de Marruecos y más recientemente Diandra, la primera esposa de Michael Douglas, y el exembajador de Estados Unidos en España James Costos.
Con el propósito de reivindicar un legado de años y, al mismo tiempo, actualizar la nómina de nombres ilustres que han pasado por sus instalaciones, el director del hotel, Antoni Ferrer, junto al relaciones públicas Tomeu Ferragut, crearon en 2015 la asociación Mallorquines de Verano. Cada año, en una velada que se celebra en la terraza panorámica de la suite 702, se premia a diferentes personalidades que pasan sus vacaciones y tiempo de descanso en Mallorca y que, además, promocionan la isla y sus virtudes sin ser residentes permanentes. Los premiados adquieren el título informal de embajadores de la isla.
Diandra Lucker, primera esposa del actor Michael Douglas, la noche que recibió la distinción de Mallorquines de Verano
A lo largo de estos años han sido distinguidos, entre otros, Diandra Lucker, primera esposa de Michael Douglas y “culpable” de traer al actor a la isla, donde ella veraneaba con sus padres desde la niñez; el exembajador de Estados Unidos en España James Costos, quien con su marido, el decorador Michael Smith, se instalan cada año en su residencia de Formentor; el príncipe Kyril de Bulgaria, con casa en Porreras, que, en 1990, celebró en la catedral de Palma su boda con la mallorquina Rosario Nadal, de la que está actualmente divorciado: el ex baloncestista Fernando Romay, que además de veranear en Mallorca, colabora con las oenegés baleares Fundación Nazaret y Projecte Home.
También recibió el título de embajador, Joaquín Prat, que este septiembre, tras despedirse de Vamos a Ver, se hará cargo de las tardes de Tele 5. El presentador veranea desde niño en Mallorca, donde la familia de su madre, Marianne Sandberg, estaba arraigada. El año pasado fueron distinguidos la modelo Celia Forner y su marido, el editor italiano Francisco Venturi, que tienen en su finca mallorquina con vistas al mar, el lugar de descanso de su vida cosmopolita y mundana.
Syliane de Vilallonga, Beatriz de Orleans, Antoni Ferrer y Norma Duval, el viernes en la entrega de 'Mallorquines de Verano'
La artista y vedette Norma Duval, con casa en Alcudia desde hace más de 30 años, fue otra de las distinguidas con el título de Mallorquines de Verano, y la noche del viernes acompañó a Beatriz de Orleans, la homenajeada de este año. Los elegidos, que adquieren el título informal de embajadores de la isla, reciben como distinción una pieza de diseño exclusivo de la firma de cristal soplado Gordiola, otro de los símbolos de Mallorca y la cena que se sirve está elaborada con productos mallorquines y se beben vinos con denominación de origen Benissalem, Pla i Llevant.
El hotel que Hassan II eligió para reunirse con el rey Juan Carlos
Ubicado en lo alto de Palma, con vistas a la bahía y más allá, el hotel fue bautizado con el nombre de la ciudad chilena que permitía, además, relacionarlo directamente con el paraíso. Fue el primer hotel de lujo de la capital balear y nació gracias a que sus promotores, la familia Alba, fueron agraciados con la lotería. Desde hace diez años, el hotel es propiedad de un grupo inversor chino que lo ha transformado de arriba a abajo, conservando la esencia sesentera de la construcción pero adecuándolo con los servicios propios de un hotel de lujo, como Spa, piscinas, jardines y alta gastronomía.
El rey Juan Carlos acompaña a su homólogo Hassan II de Marruecos durante su estancia en el hotel en 1979
Su mítica suite 702, que ocupa toda la séptima planta del hotel, ha sido la elegida por personalidades como el rey Hassan II de Marruecos, quien se plantó en Mallorca a finales de febrero de 1982 con un séquito que incluía sus propios cocineros; al final echó mano de los del hotel cuando recibió al rey Juan Carlos quien se desplazó de Madrid a Palma para almorzar con su homólogo, casi hermano, como les gustaba llamarse entre ellos Los monarcas, además, mantuvieron una reunión, que tuvo lugar en Marivent, para tratar temas bilaterales entre España y Marruecos. Así era Hassan, prefería entenderse directamente con su “hermano” aunque los poderes de decisión de cada uno de ellos fueran tan diferentes.
En aquellos años, también, otra gran amiga de la familia real, la emperatriz Farah Diba se refugió en el hotel tras quedarse viuda del Sha de Persia, fallecido en exilio de El Cairo en 1980. Farah conoció Palma aún casada, invitada por la reina Sofía, pero se alojó en el hotel Valparaíso cuando regresó a la isla, en pleno duelo, con la intención de buscar una residencia para pasar parte del año. La bella y melancólica Farah dejó en el hotel una estela de tristeza que aún recuerdan los antiguos empleados.
Farah Diba, en una foto de los años 80, cuando se alojó en el hotel, poco después de quedarse viuda del Sha
Poco tiempo después, en el verano de 1982, la ex emperatriz del Irán volvió a Palma para asistir, en el Club de Mar, acompañada por el armador griego Papamarkus (que también se alojaba en el Valparaiso), a una fiesta privada organizada por Adnan Khashoggi. Farah Diba, que estaba acompañada por sus hijos Faranaz, Ciro y Alí Reza, alquiló diez habitaciones del hotel. La idea de instalarse en Mallorca quedó en nada y Farah Diba, con los años, eligió París como su residencia definitiva.
Más alegre fueron las repetidas estancias de Julio Iglesias que, en los años 70, actuaba en diferentes puntos de la isla durante el verano. Años más tarde, ya en la cumbre de la fama, volvió a elegir el hotel en recuerdo a aquellos primeros años. José María Iñigo pasó sus vacaciones en el hotel durante muchos años veranos y Sara Montiel y Pepe Tous celebraron su banquete de bodas, al que acudieron doscientas personas, en el establecimiento.
Julio Iglesias, junto a Ramón Arcusa, durante su estancia en el hotel en los años 80
Muhamar El Gadafi y el anterior emir de Qatar también se hospedaron en el hotel, así como Xi Jinping, el actual presidente de la República Popular China, que estuvo cuando era vicepresidente acompañado de un séquito que ocupó 110 habitaciones, de las 174, incluidas las suites, que tiene el establecimiento. Recientemente se ha hospedado el alcalde de Londres, Sadiq Khan, como anteriormente lo hicieron el rey Simeón de Bulgaria, José María Aznar, Juan Antonio Samarach, Mariano Rajoy, Miguel Boyer e Isabel Preysler. La lista de famosos alojados a lo largo de los años no admite competencia: Demis Rousos, Silvia Kristel, Elke Sommer, James Mason, Montserrat Caballé, Lola Flores, Isabel Pantoja, Miguel Rios, Sabina, Gianni Agnelli, Ricky Martin, Roger Federer y un largo etcétera de nombres menos conocidos pero igualmente relevantes.
Durante años, el hotel era el elegido por los toreros que lidiaban en la plaza de Palma o en la de Inca y sigue siendo el hospedaje de todos los equipos de fútbol de Primera División que, cada quince días, sucesivamente disputan el partido de liga contra el Mallorca.