Es sabido que la familia real británica tiene un gran cariño por los animales, en especial por los caballos. Es por eso que no es de extrañar el post que han publicado en sus redes para despedir a Tyrone, un bello equino de color blanco al que le ha llegado la hora de la jubilación después de estar 15 años al servicio de la corona.
El caballo tiraba de los carruajes en el que iban sentados los distintos miembros de la familia real en las vistosas ceremonias oficiales. De ahí que fuera muy querido por todos ellos, que destacan el “noble servicio” que ha prestado a la institución. La difunta Isabel II le tenía mucho aprecio y solía ir personalmente a los establos de Royal Mews para visitarlo y darle de comer zanahorias
Tyrone se estrenó con la familia real en el 2012 llevando a Isabel II a la apertura solemne del Parlamento, y su último servicio lo realizó hace sólo unas semanas transportando al rey y a la reina durante la visita de Estado del presidente francés Emmanuel Macron.
La semana pasada, a sus 19 años, Tyrone, un caballo blanco de tiro irlandés, dio por finalizado su servicio a la corona y se reunió con su su padre, Storm, de 26 años, y su hermana, Meg, de 20, ambos también antiguos caballos de carruaje real, en el Horse Trust de Buckinghamshire, donde pasará el resto de sus días pastando en el santuario para caballos jubilados de Chiltern Hills.