¿Dan algún premio por detener a una persona? ¿O se trata de un caso de ‘famofobia’? Esas son las dos preguntas que con mucho sarcasmo se plantea Joaquín Moeckel, conocido abogado y defensor de Cayetano Rivera en el asunto que sacudió la prensa rosa: la madrugada del 29 de junio el diestro era detenido y conducido al calabozo por encararse con dos agentes de paisano que intervinieron durante una discusión en una céntrica hamburguesería de Madrid. Digerido el trance, Rivera tomó la iniciativa y tras someterse a un reconocimiento médico de lesiones el día siguiente, su siguiente paso fue interponer denuncia contra esos dos agentes y la dotación uniformada que se lo llevó detenido.
Se pregunta su abogado si...
¿Dan algún premio por detener a una persona? ¿O se trata de un caso de ‘famofobia’?

Cayetano Rivera se refugia en Mallorca dos días después de ser detenido en Madrid por presunta resistencia a la autoridad.
“Nosotros entendemos, y por eso hemos presentado denuncia en los juzgados de Plaza de Castilla, que tanto su detención como llevarlo esposado al calabozo y permanecer allí esposado hasta su puesta en libertad fue una actuación desproporcionada. Así lo hemos puesto en conocimiento de la Justicia para que esclarezca si el procedimiento fue ajustado a Derecho o no. La Policía defenderá que fue una actuación apropiada, ecuánime y justa pero nosotros estamos en la postura contraria: del mismo modo que antes de retirarte el permiso de conducir existen multas o pérdida de puntos, entendemos que antes de la detención de una persona existen muchas medidas limitativas de derechos, bien una sanción administrativa, apercibimiento o cualquier otra”.
Tanto su detención como llevarlo esposado al calabozo y permanecer allí esposado fue una actuación desproporcionada

El prestigioso abogado sevillano Joaquín Moeckel.
Para Joaquín Moeckel no solo se trata de una actuación desproporcionada sino injusta. Su cliente niega que los dos agentes de paisano se identificasen debidamente: “Si yo estoy en una discusión en una hamburguesería y aparecen dos policías de paisano, lo normal es preguntar quiénes son ustedes. Si hubiesen ido uniformados y Cayetano se resiste a la detención, nada que decir. Pero si a las 2 de la mañana dos personas de paisano intervienen en una discusión yo pregunto ‘¿Ustedes quiénes son y qué quieren?’. Me parece lógico, lo que haría cualquiera. Ellos defienden que se identificaron en dos ocasiones, claro, qué van a decir. Sé que lo tengo muy complicado porque me enfrento a cuatro policías, dos uniformados y dos de paisano, que contarán la misma versión. Pero siempre he sido un abogado valiente”.

José Luis Sanz, alcalde de Sevilla, entrega la Medalla del Mérito Civil al letrado.
Llegados a este punto y al margen del aspecto técnico de la denuncia, Moeckel hace esta reflexión: “No me gustaría pensar que se trata de un caso de ‘famofobia’, término que he inventado yo, si me permites el copyright. Y si no es eso, me pregunto de modo irónico si acaso no habrá algún premio por detener a gente. Lo digo con guasa, pero… Desde luego soy partidario de que una actuación policial sea pronta, rápida y precisa, pero qué mala suerte tuvo Cayetano y qué buena la hamburguesería porque muchas personas llaman a la Policía y tardan horas en ser atendidas”.