Durante el verano de 2003, dos jóvenes irrumpían como un tsunami en la escena musical española bajo el nombre de Andy y Lucas. Su sencillez y cercanía con el público catapultaron como un resorte a aquellos gaditanos hacia el estrellato, a través de sus letras del día a día, encapsuladas en temas pegadizos que dieron lugar a populares canciones como Son de amores o Tanto la quería. Más allá de alcanzar el número uno en ventas, el éxito de la dupla trascendió cuando sus sencillos se convirtieron durantes años en auténticos himnos románticos del pop español.
Dos décadas después del inicio de un fenómeno artístico que (con sus altibajos) ha logrado sobrevivir al paso del tiempo, el dúo gaditano afronta la recta final de su carrera, que afronta una etapa marcada no solo por los problemas cardíacos y respiratorios de uno de sus integrantes, sino también por un desgaste personal que lleva tiempo gestándose entre ambos y que se ha hecho aún más evidente tras una reciente entrevista.
Hace escasos días, era el propio Lucas quien aseguró en el programa de Mediaset, Me quedo conmigo, que había sido él quien, durante todo este tiempo sobre los escenarios, había llevado la gestión económica del grupo porque, según el cantante, su compañero artístico carecía de esa disciplina y “no valía para hacer eso”. A sus duras declaraciones, el vocalista añadió que también había sido él “quien más había tirado para adelante” , afirmando además que se consideraba “el macho alfa del grupo” por cargar con “mucha responsabilidad a sus espaldas”.
La réplica no se hizo esperar, y en esta ocasión fue Andy, la otra cara del dúo, quien se dio por aludido y sutilmente decidió responder a su colega de profesión, a través de la publicación de frases en su perfil de Instagram - tales como:“Gana en silencio, deja que piensen que estás perdiendo” o “Toda deuda se paga. Toda verdad se revela. Ley de vida”- que muchos interpretaron como indirectas.
Días más tarde y ante el revuelo mediático, era el propio Lucas quien matizaba sus comentarios en televisión mediante un mensaje en sus redes sociales. “Os recomiendo de corazón ver el capítulo. Comprobaréis mis palabras sobre Andy y podréis sacar vuestras propias conclusiones. Todo lo digo desde el respeto, la admiración, la humildad, el amor y el cariño hacia él.Y con esto chinpon,a descansar que se vienen conciertos”, escribió. A pesar del intento para apaciguar las aguas, la polémica ya estaba servida.
Andy y Lucas durante un concierto.
Pese a las disculpas del cantante andaluz, este fin de semana el periodista Saúl Ortiz aseguró en el programa Fiesta que la relación entre ambos músicos estaba rota. Un tenso contexto que hace para los andaluces aún más dificíl afrontar los cuatro conciertos que tienen aún pendientes, siendo el último y definitivo, el próximo 10 de octubre en Madrid, donde el dúo pondrá punto y final definitivo a su trayectoria.
Ante el inminente final del grupo, y según adelantó el citado espacio de Mediaset, Andy ya habría comenzado a grabar sus primeros sencillos con el objetivo de iniciar su camino como artista en solitario. Un nuevo capítulo para el cantante que vería muy probablemente la luz durante el primer trimestre del año que viene.
Tras hacerse pública su decisión y con el fin de zanjar las especulaciones sobre los posibles desencuentros entre ambos músicos, fue el propio Lucas, quien, apenas unos minutos después de conocerse la noticia, quiso dejar atrás las rencillas y mostrar en antena su apoyo a su futuro excompañero . “Estaría en todo su derecho de hacerlo, porque al final nos vamos a separar y él tiene que seguir su camino y yo el mío”, señaló. “Si saca el disco y hace un concierto, el primero que voy a estar ahí apoyándole voy a ser yo”, señaló.

