Los tiroteos indiscriminados sobre la población civil de Sarajevo durante el asedio del Cuerpo de Sarajevo-Romanija –una fuerza del Ejército de la República Srpska que no era sino la continuidad del 4.º Cuerpo de Sarajevo del Ejército Popular Yugoslavo– vuelven a ser noticia más de tres décadas después de la guerra que desangró los Balcanes por su crueldad y claro ejemplo de la deshumanización que llega a provocar la tecnología militar. Y, lógicamente, por la impunidad con la que actuaron los militares y voluntarios del bando serbobosnio durante el conflicto. Ahora, un juzgado de Milán investiga la participación de ciudadanos italianos en esos safaris humanos.
Que realmente lo eran lo evidenció el juicio contra Radovan Karadžić que se celebró en el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia, establecido por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en 1993 para juzgar las violaciones del Derecho Penal Internacional en la región por parte de los litigantes en los diversos conflictos armados que se produjeron tras la desmembración de la República Federativa Socialista de Yugoslavia.
El asedio se inició en abril de 1992 y no finalizó hasta febrero de 1996. Casi cuatro años de bombardeos y tiroteos diarios que acabaron con la vida de más de 12.000 personas, civiles en su inmensa mayoría. Unos ataques que destruyeron la ciudad, convertida en una ratonera para los más de 300.000 residentes que no lograron huir a tiempo. Tratar de hacerlo, de hecho, era una trampa mortal.
Como expuso la sala que juzgó a Karadžić en tanto que presidente de la República Srpska y, como tal, comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de la República Srpska, entre finales de mayo de 1992 y octubre de 1995 se estableció una campaña de francotiradores y bombardeos contra la población civil de Sarajevo, cuyo propósito no era otro que era sembrar el terror entre la población civil.
Radovan Karadžić durante su alegato final ante el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia
”Esta práctica de disparar contra civiles fue común y persistente. Ocurría casi a diario y continuó prácticamente sin cesar durante todo el conflicto. Los civiles de Sarajevo eran atacados por francotiradores mientras recogían agua, caminaban por la ciudad y utilizaban el transporte público. Además, los niños eran atacados mientras jugaban frente a sus casas, caminaban con sus padres o volvían del colegio, e incluso mientras iban en bicicleta”, señala la sentencia en sus hechos probados en la versión resumida que fue difundida por el tribunal y que ofrecemos extractada, centrada en la referencia a los hechos de Sarajevo.
El juicio, que no se pudo celebrar hasta el 2009, después del arresto de un Karadžić que vivió casi 13 años prófugo de la justicia en Serbia, se alargó durante 499 días, juicio, durante los cuales escuchó el testimonio de 434 testigos. Asimismo, la sala recibió el testimonio escrito de 152 testigos adicionales y se presentaron 11.469 pruebas documentales. El expediente completo del juicio consta de más de 48.000 páginas de transcripción, 95.000 de documentos presentados y más de 190.000 de pruebas admitidas.
Casi cuatro años de bombardeos y tiroteos diarios acabaron con la vida de más de 12.000 personas, civiles en su gran mayoría
La sentencia, leída por el juez O-Gon Kwon, lo declaró culpable de genocidio, de los crímenes de lesa humanidad de persecución, exterminio, asesinato, deportación y actos inhumanos y de los actos de violación de las leyes o costumbres de la guerra mediante actos de terrorismo, violación, ataques ilegales contra civiles y toma de rehenes.
Por todo ello, el tribunal lo condenó a una pena de 40 años de prisión, elevada a cadena perpetua en el 2019 por el organismo judicial que cerró los casos de este tribunal especial. Actualmente cumple su pena en una prisión de la isla británica de Wight. Los francotiradores de Sarajevo quedaron impunes.
La sentencia
“El acusado fue miembro fundador del Partido Democrático Serbio y se desempeñó como su presidente desde julio de 1990 hasta julio de 1996. Fue presidente del Consejo de Seguridad Nacional de la República Serbia de Bosnia y Herzegovina y el 12 de mayo de 1992 el acusado fue elegido presidente de la Presidencia de la República Serbia de Bosnia y Herzegovina. Desde el 17 de diciembre de 1992, fue el único presidente de la República Srpska y comandante supremo de las Fuerzas Armadas de la República Srpska.
”El acusado ha sido juzgado por 11 cargos. Dos cargos de genocidio, cinco cargos de crímenes de lesa humanidad (a saber: persecución, asesinato, exterminio, deportación y traslado forzoso) y cuatro cargos de violaciones de las leyes o costumbres de la guerra (a saber: asesinato, actos de violencia cuyo propósito principal era sembrar el terror entre la población civil, ataques ilegales contra civiles y toma de rehenes).
”En la acusación, la Fiscalía alegó que el acusado participó en cuatro acciones criminales conjuntas. La Fiscalía alegó lo siguiente:
”Desde al menos octubre de 1991 hasta el 30 de noviembre de 1995, el acusado participó en una acción criminal conjunta cuyo objetivo era expulsar permanentemente a los musulmanes y croatas bosnios del territorio reclamado por los serbios de Bosnia en Bosnia y Herzegovina mediante los crímenes imputados en la misma.
El acusado promovió una campaña de francotiradores y bombardeos contra la población civil de Sarajevo
”Entre abril de 1991 y el 30 de noviembre de 1995, el acusado participó en una acción criminal conjunta cuyo objetivo era expulsar permanentemente a los musulmanes y croatas bosnios del territorio reclamado por los serbios de Bosnia en Bosnia y Herzegovina mediante los crímenes imputados en la misma.
”Entre 1992 y noviembre de 1995, el acusado participó en una acción criminal conjunta para establecer y llevar a cabo una campaña de francotiradores y bombardeos contra la población civil de Sarajevo, cuyo propósito principal era sembrar el terror entre la población.
”Entre el 26 de mayo y el 19 de junio de 1995, aproximadamente, el acusado participó en una acción criminal conjunta para tomar como rehenes a más de 200 miembros de las fuerzas de paz de la ONU y observadores militares con el fin de obligar a la OTAN a abstenerse de realizar ataques aéreos contra objetivos militares serbobosnios.
”Entre los días previos al 11 de julio de 1995 y hasta el 1 de noviembre de 1995, el acusado participó en una acción criminal conjunta para eliminar a los musulmanes bosnios en Srebrenica, asesinando a los hombres y niños de Srebrenica y expulsando por la fuerza a las mujeres, los niños pequeños y algunos ancianos.
Esta práctica de disparar contra civiles fue común y persistente, casi a diario, y continuó durante todo el conflicto
”Además, la Fiscalía acusó al acusado de haber planeado, instigado, ordenado y/o ayudado e instigado los delitos imputados en la acusación.
(…)
”Acción criminal conjunta de Sarajevo.
”La Sala constata que, desde finales de mayo de 1992 hasta octubre de 1995, la población civil de Sarajevo fue bombardeada y atacada por francotiradores por miembros de las Fuerzas Serbobosnias, concretamente el Cuerpo de Sarajevo-Romanija (SRK). Durante todo este período, las unidades del SRK mantuvieron posiciones en las colinas que rodean la ciudad, cercándola y manteniéndola sitiada. Desde sus posiciones, dispararon deliberadamente contra civiles en Sarajevo, incluso contra tranvías.
”Esta práctica de disparar contra civiles fue común y persistente. Ocurría casi a diario y continuó prácticamente sin cesar durante todo el conflicto. Los civiles de Sarajevo eran atacados por francotiradores mientras recogían agua, caminaban por la ciudad y utilizaban el transporte público. Además, los niños eran atacados mientras jugaban frente a sus casas, caminaban con sus padres o volvían del colegio, e incluso mientras iban en bicicleta. Las unidades del SRK abrían fuego de francotiradores contra civiles desde varios puntos estratégicos de la ciudad, donde habían instalado nidos de francotiradores profesionales y permanentes.
”La Sala también está convencida de que, a partir de finales de mayo de 1992, las unidades del SRK llevaron a cabo bombardeos deliberados contra la población civil de la ciudad o abrieron fuego de forma desproporcionada e indiscriminada contra ella. Lo hicieron utilizando una multitud de armas pesadas, incluyendo morteros de 80 y 120 mm, así como piezas de artillería, todas ellas ubicadas, de forma más o menos permanente, en las colinas que rodean Sarajevo.
Los objetivos seleccionados carecían de valor militar y el fuego se dispersaba indiscriminadamente por la ciudad
”Miles de proyectiles cayeron sobre la ciudad durante todo el conflicto, incluso en zonas residenciales e instalaciones civiles, como hospitales, mercados y otros lugares donde se reunía la población civil. A menudo, los objetivos seleccionados por los artilleros del SRK carecían de valor militar, y el fuego se dispersaba indiscriminadamente por la ciudad.
”En 1995, las unidades de las SRK también lanzaron varias bombas aéreas modificadas sobre la ciudad, un arma altamente destructiva que, sin embargo, no había sido probada adecuadamente. Por lo tanto, estos ataques con bombas aéreas modificadas fueron indiscriminados. Esta práctica de francotiradores y bombardeos contra civiles continuó durante más de tres años.
”Teniendo en cuenta la duración y la naturaleza de la práctica, la Sala considera que la intención de las unidades SRK y sus comandantes era atacar a civiles y utilizar fuego indiscriminado o desproporcionado contra la ciudad. Por lo tanto, la Sala está convencida de que el SRK llevó a cabo una campaña de francotiradores y bombardeos en Sarajevo con la intención, entre otras cosas, de aterrorizar a la población civil residente. La Sala también constata que esta campaña causó miles de heridos y muertos entre la población civil de la ciudad durante el período pertinente.
”Además, la Sala observa que todos los civiles que residían en la ciudad durante ese tiempo experimentaron un miedo extremo y sufrieron grandes penurias, ya que nunca sabían cuándo serían atacados por el SRK.
Esta campaña tenía como objetivo aterrorizar a la población civil y causó miles de heridos y muertos entre ella
”La Sala observa que, para llegar a las conclusiones anteriores, se basó tanto en las pruebas generales relativas a la situación en la ciudad entre 1992 y 1995 como en las pruebas relativas a incidentes específicos de bombardeo y francotiradores enumerados en los anexos F y G de la acusación. Con respecto a estos últimos, la Sala considera al SRK responsable de todos los incidentes excepto tres, a saber, los incidentes enumerados en los anexos F.5, F.7 y G.6. Además, el juez Melville Baird adjunta su voto particular en relación con el Incidente Programado G.8.
”Durante el juicio, el acusado argumentó que las unidades del SRK nunca atacaron a civiles, sino que respondían a ataques provenientes de la ciudad y, al hacerlo, se centraron en objetivos militares ubicados en ella. El acusado también argumentó que la parte musulmana bosnia bombardeó y atacó a sus propios civiles para culpar a los serbios bosnios y provocar una intervención de la comunidad internacional.
”Sin embargo, al llegar a las conclusiones antes mencionadas, la Sala ha rechazado estas alegaciones del acusado. La Sala acepta que la guerra fue librada por ambas partes, que los dos bandos beligerantes se enfrentaron durante todo el conflicto y que las unidades del SRK también atacaron personal militar y posiciones militares del adversario. Sin embargo, las pruebas en este caso están repletas de ejemplos de fuego del SRK que no se dirigió contra objetivos militares en la ciudad, sino contra objetivos civiles, y de fuego indiscriminado o desproporcionado.
”Los incidentes programados específicos de los que se responsabilizó al SRK son claros ejemplos de este tipo de fuego. Además, la persistencia de los francotiradores y los bombardeos dirigidos contra la población civil y el elevado número de víctimas civiles en la ciudad no pueden explicarse por el hecho de que la guerra en Sarajevo fuera librada por ambos bandos.
Las pruebas en este caso están repletas de ejemplos de fuego que no se dirigió contra objetivos militares
”Por lo tanto, resulta evidente para la Sala que los civiles fueron blanco directo del SRK, como lo demuestran ampliamente los incidentes programados de francotiradores, o fueron objeto de fuego indiscriminado o desproporcionado, como cuando el SRK lanzó bombas aéreas modificadas contra la ciudad o dispararon proyectiles de mortero contra lugares donde se reunían civiles.
”Con respecto al argumento del acusado de que la parte musulmana bosnia atacó a sus propios civiles, la Sala acepta que dicha parte tenía la intención de provocar a la comunidad internacional para que actuara en su favor y, como resultado, en ocasiones atacó al personal de la ONU en la ciudad o abrió fuego contra territorio bajo su control para culpar a los serbios de Bosnia. Sin embargo, las pruebas indican que las ocasiones en que esto ocurrió fueron insignificantes en comparación con las pruebas relativas al fuego del SRK contra la ciudad. Por lo tanto, no afectan la opinión de la Sala sobre la práctica del SRK de atacar a los civiles en la ciudad o lanzar ataques indiscriminados o desproporcionados.
”La Sala, por consiguiente, considera que miembros del SRK cometieron asesinatos, ataques ilegales contra civiles y actos de terrorismo como violaciones de las leyes o costumbres de la guerra, así como asesinatos como crímenes de lesa humanidad. La Sala ahora examina la responsabilidad del acusado por dichos crímenes.
”La defensa del acusado en relación con este componente se basó en que no existía un Comando Conjunto de Sarajevo ni plan para establecer una campaña de francotiradores y bombardeos, ni intención de matar, atacar o aterrorizar a la población civil de la ciudad. En cambio, según él, la ciudad estaba sumida en la guerra, y el terror que sentía la población era simplemente una consecuencia habitual de dicha guerra.
Los francotiradores individuales o las unidades de francotiradores estaban bajo el control del mando del SRK
”Sin embargo, como se indicó anteriormente, la persistencia de los francotiradores y bombardeos dirigidos contra la población civil y el elevado número de víctimas civiles en la ciudad no pueden explicarse por el hecho de que hubiera una guerra en Sarajevo. Además, la Sala está convencida de que los francotiradores individuales o las unidades de francotiradores dentro del SRK, así como sus dotaciones de mortero y artillería, estaban todos bajo el control del mando del SRK y, en última instancia, del Estado Mayor Principal del Ejército de la República Srpska.
”Finalmente, desde el comienzo del conflicto en Bosnia y Herzegovina, el liderazgo político y militar de los serbios de Bosnia, en particular los acusados Momčilo Krajišnik, Nikola Koljević, Biljana Plavšić y Ratko Mladić, reconocieron y defendieron la importancia de Sarajevo para la causa serbia de Bosnia y Herzegovina y el conflicto en el país.
”La ciudad era importante no sólo por su simbolismo y el hecho de que, sin ella, la parte musulmana de Bosnia no tendría un Estado independiente funcional, sino también porque tenía un significado especial para los acusados, quienes la consideraban su ciudad natal. Por ello, todos deseaban controlar Sarajevo, o al menos parte de ella, un proyecto al que se dedicaron durante todo el conflicto y que, dada la naturaleza multiétnica de la ciudad, sólo podía lograrse mediante una muralla de fuego, es decir, a través de francotiradores y bombardeos.
”En consecuencia, la Sala determina que existió un plan común que se inició a finales de mayo de 1992 y se extendió hasta octubre de 1995, y que emanó del liderazgo político y militar serbobosnio. El propósito principal de dicho plan era sembrar el terror entre la población civil de Sarajevo mediante una campaña de francotiradores y bombardeos.
Dada la naturaleza multiétnica de la ciudad, sólo podía controlarse mediante una muralla de fuego
”Con base en las pruebas relativas a los incidentes programados de francotiradores y bombardeos, la Sala también considera probado que este plan implicó la comisión de asesinatos, actos de terror y ataques ilegales contra civiles. Los acusados Ratko Mladić, Stanislav Galić, Dragomir Milošević, Momčilo Krajišnik, Nikola Koljević y Biljana Plavšić conformaron un grupo de personas que actuaron de conformidad con este plan común y compartieron la intención de cometer los crímenes que formaban parte del plan.
”La Sala también considera que el acusado contribuyó significativamente a este plan. Al ocupar la cúspide de las estructuras políticas, militares y gubernamentales, el acusado apoyó a Mladić en su estrategia en Sarajevo, que consistía en intensificar la campaña de francotiradores y bombardeos y resolver la situación en la ciudad por la vía militar.
”Como Comandante Supremo del Ejército de la República Srpska, el acusado también emitió o aprobó directivas militares relativas a Sarajevo, prolongando así el asedio y permitiendo, a su vez, que la campaña de francotiradores y bombardeos continuara sin cesar. Además, al tener el control de iure sobre el SRK y el Ejército, que pudo ejercer de hecho durante todo el conflicto, el acusado participó directamente en asuntos militares en Sarajevo y emitió numerosas órdenes relacionadas con ellos, tanto a nivel estratégico como operativo. También ascendió y recompensó a Mladić, Galić y Dragomir Milošević en varias ocasiones, a pesar de saber que estaban implicados en ataques contra civiles de Sarajevo.
”Desde la creación del Comité Conjunto de Emergencias de Sarajevo, el acusado fue informado sistemáticamente sobre los ataques del SRK contra civiles en la ciudad, incluidos muchos de los incidentes programados que se detallan en la sentencia. Sin embargo, en lugar de garantizar que cesaran los ataques contra civiles, negó la responsabilidad del SRK en los mismos y, en cambio, acusó a la parte musulmana bosnia de perpetrarlos. Además, desvió cualquier crítica relacionada con las prácticas de tiro del SRK planteando cuestiones ajenas o enfatizando que era necesario actuar de esa manera para defender el territorio serbobosnio.
No hubo ni un solo intento de procesar a ningún soldado del SRK por abrir fuego contra civiles en Sarajevo
”A pesar del funcionamiento del sistema de justicia militar dentro del Ejército de la República Srpska y el SRK, no hubo ni un solo intento de procesar a ningún soldado del SRK por abrir fuego contra civiles en Sarajevo, lo que revela que la cultura dentro del SRK era de absoluta impunidad. Si bien hubo ocasiones en que el acusado intentó frenar los ataques contra civiles en Sarajevo, esto sólo ocurrió cuando se vio presionado por la comunidad internacional o bajo la amenaza de una intervención de la OTAN, y nunca resultó en un castigo efectivo para ningún soldado del SRK. Por el contrario, cuando no existía tal presión, permitió que la campaña de francotiradores y bombardeos se intensificara nuevamente. También intensificó la campaña cuando el liderazgo musulmán bosnio se negó a aceptar acuerdos de paz en sus términos.
”La Sala está, por lo tanto, convencida de que el acusado utilizó la campaña de francotiradores y bombardeos, causando terror entre la población civil de Sarajevo, como medio para ejercer presión sobre los líderes musulmanes bosnios y la comunidad internacional en pos de sus objetivos políticos.
”Sobre la base de todas estas contribuciones, la Sala considera que, al igual que en el caso de Mladić, Galić y Dragomir Milošević, la intervención del acusado fue tan destacada para acción criminal conjunta que, sin su apoyo, los ataques de la SRK contra civiles en la ciudad no habrían podido producirse.
”La Sala también considera que la única inferencia razonable que puede extraerse de estos actos y omisiones del acusado, y de sus declaraciones detalladas en la sentencia, es que pretendía cometer asesinatos, ataques ilegales contra civiles y sembrar el terror, y que compartía esta intención con los demás miembros de la acción criminal conjunta de Sarajevo.
”En consecuencia, en relación con la acción criminal conjunta de Sarajevo, el acusado tiene responsabilidad penal individual de conformidad con el artículo 7(1) del Estatuto por asesinato, ataques ilegales contra civiles y terrorismo, como violaciones de las leyes o costumbres de la guerra y por asesinato como crimen de lesa humanidad.”


