La policía de Hungría anunció este jueves la prohibición de la marcha del Orgullo LGTBIQ+ de Budapest, prevista para el sábado 28 de junio, después de que el Ayuntamiento decidiera asumir su organización para proporcionarle paraguas municipal y sortear así el veto del Gobierno ultranacionalista del primer ministro Viktor Orbán. La jefatura de policía de la capital actuó en virtud de una enmienda a la ley sobre derecho de reunión, aprobada el pasado marzo por el Parlamento e impulsada por Fidesz, el partido de Orbán, una enmienda que en la práctica prohíbe el desfile festivo del Orgullo con el argumento de proteger a los menores de edad.
El alcalde de Budapest, el ecologista Gergely Karácsony, replicó ayer mismo que la marcha igualmente se celebrará. “Esta prohibición no tiene ningún valor”, escribió en Facebook Karácsony, argumentando que no necesita autorización oficial para el desfile porque se trata de un “evento municipal”, en abierto desafío a la policía magiar.
Representación en el Orgullo de Budapest
Políticos e instituciones de algunos países europeos anunciaron en su día que acudirán al desfile, entre ellos el ministro de Cultura español, Ernest Urtasun
“La Municipalidad Metropolitana organizará el festival del Orgullo y la Libertad de Budapest como evento municipal el 28 de junio, día de la Independencia de Hungría. Y punto”, zanjó el edil. En efecto, hace unos días Karácsony había anunciado que Budapest iba a reactivar la ‘fiesta de la libertad’ con la que durante años se celebró la salida de las tropas soviéticas de Hungría en 1989.
Decenas de miles de personas de colectivos LGTBIQ+ de toda Europa planean viajar a Budapest ese día para dar su apoyo, así como instituciones de países europeos, como el Parlamento de los Países Bajos, y unos 70 eurodiputados de distintas nacionalidades.
El ministro de Cultura de España, Ernest Urtasun; el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni; y cuatro diputadas en representación del Parlament de Catalunya, anunciaron también en distintos momentos días atrás su intención de acudir al desfile en la capital de Hungría. También se espera a la comisaria europea de Igualdad, Hadja Lahbib, según aseguraron ayer los organizadores.“
“La policía, actuando en el marco de sus competencias en materia de reuniones públicas, prohíbe la celebración” de la marcha del 28 de junio, según publicó la jefatura de policía de Budapest en su página web. “No se puede descartar que personas menores de 18 años puedan estar expuestas a conductas prohibidas por la ley”, al estar presentes en la marcha o “pasivamente” por ser un acto público, arguyó el jefe de policía.
Si bien la prohibición policial técnicamente no puede ser apelada, los organizadores podrían llevarla ante el Tribunal Supremo (TS) de Hungría, país miembro de la UE desde el 2004 que se encuentra en continua fricción con Bruselas desde el regreso al poder de Orbán hace quince años. El líder de Fidesz ya gobernó entre 1998 y el 2002. Actualmente es el gobernante de Europa que lleva más tiempo en el poder.
Quienes participen en la marcha de Budapest afrontan multas de hasta 500 euros, suma “que se destinará a la protección de la infancia”, indicó la policía. Los agentes tienen la facultad de identificar a los asistentes mediante herramientas de reconocimiento facial, en tanto que considerados infractores. El grueso de los partidos de la oposición, oenegés de derechos humanos y activistas del colectivo LGTBIQ+ llevan meses y años denunciando la deriva legislativa reaccionaria del Gobierno de Orbán, y alertan de que vulnera derechos de la ciudadanía y fomenta el incremento de la homofobia.
Marcha del Orgullo el 28 de junio
Quienes participen en la marcha de Budapest afrontan multas de hasta 500 euros, y la policía tiene la facultad de identificar a los asistentes mediante herramientas de reconocimiento facial
La enmienda a la ley de reunión invocada por la policía húngara para prohibir la marcha del Orgullo fue propuesta por el partido Fidesz y recibió en el Parlamento el apoyo de diputados de extrema derecha. La enmienda fue aprobada el pasado 18 de marzo por 136 votos a favor y 27 en contra (36 diputados no votaron). El texto señala que se prohíben “las reuniones que promuevan o exhiban el cambio de sexo de nacimiento o la homosexualidad”.
Esta formulación se basa a su vez en un paquete legislativo precedente, aprobado por el Parlamento en junio del 2021 también a instancias de Fidesz, que prohíbe la “promoción” de la homosexualidad y de la reasignación de género ante menores de 18 años. Esta normativa impide abordar la homosexualidad en programas educativos en la escuela.


