El presidente de Argentina, Javier Milei, ha respondido por primera vez a los opositores ante las acusaciones de corrupción que su partido afronta estas semanas, el escándalo más importante desde el inicio de su gobierno. En sus primeras declaraciones de peso sobre el escándalo de corrupción, Milei ha rechazado las críticas y ha dirigido su acusación hacia sus rivales políticos de orquestar una campaña de difamación contra él y su partido libertario.
“La opereta de esta semana no es más que otro ítem en la larga lista de maniobras de la casta”, ha declarado el líder de La libertad avanza. “Como todas las anteriores, es otra mentira”, ha declarado Milei, quien ya amenazó con emprender acciones legales con el ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis), quien supuestamente destapó el escándalo después de filtrar varios audios comprometidos. “Lo vamos a llevar a la justicia y vamos a probar que mintió”, amenazó el presidente.
Crispación política
Milei califica las acusaciones por corrupción como “otra maniobra de la casta”
La trama de corrupción que salpica a Milei e implica directamente a su hermana Karina, quien actualmente es la secretaria de la presidencia, llega en un momento muy delicado respecto a la agenda política del país y el partido Gobernante. El próximo mes de setiembre, la provincia de Buenos Aires será la primera en votar en las elecciones legislativas del país -la primera vez en una fecha distinta a las nacionales desde 2003- en la que se escogerán el relevo parcial del Senado y Diputados, definiendo el control del congreso.
La fecha prevista para los 'midterm' en el resto de Argentina es el 6 de octubre, unos comicios que se prevén complicados para el partido gobernante, cuyo respaldo podría verse afectado por el escándalo de corrupción.