La viabilidad del plan de paz que impulsa Donald Trump aún está en entredicho, pero los aliados de Ucrania, la Coalición de Voluntarios, insisten en preparar el futuro despliegue de tropas que garanticen un eventual alto del fuego.
Emmanuel Macron anunció ayer que, con carácter inmediato, los planes operativos serán elaborados por un “grupo de trabajo” compuesto por representantes de Francia, Gran Bretaña, Turquía y -por primera vez- Estados Unidos. Eso no presupone que los cuatro países vayan a enviar tropas sobre el terreno. Francia y Gran Bretaña sí parecen dispuestas. El primer ministro Keir Starmer lo confirmó ayer. El papel de Turquía se concentraría en el control del mar Negro. Estados Unidos podría asegurar la cobertura logística, comunicaciones, satélites, etcétera, aunque algunos borradores que se han filtrado en las últimas semanas también incluían a soldados norteamericanos en suelo ucraniano.
Macron corrige al jefe del Estado Mayor, tranquiliza al país y dice que no enviará jóvenes franceses a la guerra
Después de una reunión telemática entre los 35 países de la Coalición de Voluntarios, en la cual participó el secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, Macron fue menos optimista que Trump, quien, poco después, dijo que se está “muy cerca” de un acuerdo, si bien reconoció que “no es fácil”. El presidente francés aludió a los bombardeos rusos sobre Kyiv, una realidad que contradice por completo el diálogo de paz. “No hay voluntad rusa de un cese el fuego”, subrayó.
Además de preparar el despliegue de tropas, los aliados de Ucrania acordaron seguir adelante con los preparativos para la congelación de activos rusos, un dinero que debe asegurar la reconstrucción del país agredido. Esta medida, según Macron, es importante para aumentar la presión sobre el Kremlin en este momento.
En medio de una febril actividad diplomática a múltiples bandas, incluidos contactos directos entre representantes rusos, ucranianos y estadounidenses en Abu Dabi, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, alertó de que el plan de paz definitivo no puede alejarse “del espíritu y la letra” de lo que Trump y Putin acordaron en agosto pasado en su encuentro en Alaska. Lavrov criticó con especial vehemencia a Macron por querer enviar tropas a Ucrania, un propósito que consideró “una quimera”.
Horas antes Macron había querido tranquilizar al país y dijo que no está previsto enviar a Ucrania a jóvenes soldados formados en un futuro servicio militar voluntario. En una entrevista con la cadena RTL, el presidente francés intentó zanjar la polémica a raíz de un reciente discurso, muy alarmante, del jefe del Estado Mayor, el general Fabien Mandon, quien advirtió del riesgo de guerra contra Rusia y la necesidad de aceptar que Francia pierda a sus hijos.
Reacciones
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, critica a Macron por querer enviar tropas a Ucrania, un propósito que considera “una quimera”
La intervención de Macron se produjo en vísperas de anuncio, este jueves, de un servicio militar voluntario. El presidente se sintió obligado a dejar claro que su objetivo no es implicar a Francia en un conflicto, y menos aún enviar al frente a jóvenes recién adiestrados. Siempre ha dicho que si manda tropas será como garantía, tras la firma del alto el fuego y en la retaguardia, no para luchar. Se deduce que serían soldados profesionales. “Hace falta en cualquier caso, de inmediato, eliminar la confusa idea que consistiría en decir que vamos a enviar a nuestros jóvenes a Ucrania”, afirmó.
El discurso de Mandon fue muy criticado desde todos los ámbitos políticos por crear una ansiedad innecesaria. Muchos consideraron que se había excedido y que corresponde a los líderes políticos, como el presidente y el Parlamento, hablar en estos términos. Sin embargo, la ministra de Defensa, Catherine Vautrin, lo respaldó, y Macron descartó la idea de destituirle.
El presidente de la República se sintió incómodo con la controversia porque Mandon, antes de su actual cargo, fue su principal consejero militar en el Elíseo. Muchos han creído que el general hablaba por boca de Macron.

