La ola de calor de agosto hace estragos en la Sierra Sur de Sevilla, que ahora afronta las consecuencias del consumo disparado de agua por parte de la población derivado de las altas temperaturas que durante 16 días han mantenido los termómetros a 44-45ºC. Unas 17.000 personas de seis municipios de la comarca se han quedado sin agua por la noche debido a las restricciones en el suministro, provocadas por el bajo nivel de los depósitos y los problemas de bombeo tras varios días de consumo extremo.
Los cortes, que se producen entre las 23:00 y las 8:00 horas, afectan a Martín de la Jara, Los Corrales, El Saucejo, Algámitas, Villanueva de San Juan y La Roda de Andalucía, todos ellos integrados en el Consorcio de Aguas de la Sierra Sur de Sevilla.
Restricciones hasta que la situación se revierta
Ha sido a través de un comunicado en el que el Consorcio ha explicado los motivos que le han llevado a adoptar estas medidas, en el que se ha pedido a la población a extremar el ahorro doméstico: “El compromiso de cada hogar es clave para garantizar un suministro sostenible, mantener la calidad del agua y conservar los ecosistemas naturales que dependen de ella”, se ha subrayado.
El ente ha avanzado que las restricciones estarán activas en tanto en cuanto la situación no se revierta y se garantice que el suministro llegue a todas las casas. Es decir, hasta que los niveles de almacenamiento se recuperen, cuyos depósitos han quedado al mínimo generando interrupciones eléctricas y, por tanto, problemas en los sistemas de bombeo.
No es la primera vez que la comarca sufre estas restricciones. Ya el pasado verano, tras años de sequía, la situación era extrema y los cortes de agua eran rutinarios. Los depósitos de la zona dependen en gran parte del embalse de La Puebla de Cazalla y de captaciones subterráneas, que ya estaban en niveles muy bajos tras varios meses de sequía. En agosto 2024, la cuenca del Guadalquivir rondaba apenas el 20–25% de capacidad, según datos de la Confederación Hidrográfica.
36 muertes por calor en Andalucía, 14 de ellas en la provincia sevillana
El mes de agosto arrancaba con el mercurio rozando, de manera sostenida, los 44-45º en distintos puntos de Andalucía en lo que se ha considerado la tercera peor ola de calor en el país por duración e intensidad, la tercera más prolongada desde 1975 (del 3 al 18 de agosto).
Especialmente significativo ha sido su impacto en las personas. La ola dejó un saldo trágico en Andalucía, con 36 muertes atribuidas al calor extremo, siendo Sevilla la provincia más afectada con 14 fallecimientos, junto a numerosos ingresos hospitalarios y urgencias médicas.
Peligro extremo de incendios
La ola de calor se ha ido pero el riesgo por incendios sigue siendo extremo en la comunidad. Si bien la mayoría de los conatos han sido controlados gracias a la rápida actuación del Plan Infoca, las evacuaciones y momentos críticos en Tarifa o Jabugo recuerdan lo cerca que estuvo el fuego de convertirse en tragedia. Ante esta situación, la alerta sigue vigente y sigue siendo clave extremar la precaución y estar alerta ante cualquier indicio de incendio.
Así lo explicaba el consejero de presidencia, Antonio Sanz, quien aseguraba que, aunque la ola de calor haya terminado, el riesgo de incendios sigue siendo extremo. Las masas forestales presentan estrés hídrico elevado tras meses de calor y falta de lluvia, lo que las hace altamente inflamables. Por otro lado, lanzaba un recordatorio acerca de la prohibición de hacer barbacoas, la quema de residuos agrícolas o del peligro de arrojar vidrio, basura o colillas en zonas naturales.