Acuerdo del Ayuntamiento y los bares de Mandri para que no les multen de nuevo por el botellón de Navidad

Los restauradores de la calle Mandri acordaron este miércoles con el distrito de Sarrià-Sant Gervasí cómo trabajar el 25 de diciembre a fin de que la Guardia Urbana no les multe. Hace años que centenares de jóvenes del barrio montan la tarde de Navidad un gran botellón en esta calle.

Pocos días atrás Guayana Guardian se hizo eco de las quejas de los restauradores, quienes denunciaron que el año pasado de manera previa la policía municipal les recomendó servir aquel día en vasos de plástico, y que luego les sancionó con multas de unos 4.500 euros por este concepto y también por el ruido que la gente hizo en la calle.

Tal y como informaron fuentes de la asociación de comerciantes de la calle Mandri, el acuerdo con el ejecutivo del alcalde Jaume Collboni prevé que a fin de mitigar las molestias vecinales los restauradores tendrán sus terrazas recogidas a las cinco de la tarde, controlarán los accesos de sus establecimientos para que ningún cliente salga a la calle con bebidas y también se asegurarán de que en ningún momento se supera el aforo permitido de cada local.

Los restauradores que no cumplan con estos requisitos sí que pueden ser de nuevo sancionados. Los negocios acogen este acuerdo con relativa satisfacción, en tanto que si bien las condiciones les parecen aceptables, llevan todo el año pidiendo al Ayuntamiento que les aclare cómo tenían que comportarse ante un botellón con cuya convocatoria no tienen nada que ver. “Nos llegaron a insinuar que cerráramos, cuando el 25 es uno de los días más importantes del año”.

Por otro lado los restauradores continúan esperando la resolución de los recursos que pusieron a las multas interpuestas por el Ayuntamiento.