Agentes de la Guardia Civil han desarrollado diversas investigaciones en relación con incendios forestales ocurridos en la provincia cacereña durante los últimos meses. Las pesquisas se han saldado con la detención de cuatro personas por delitos cometidos de manera intencionada y la investigación de otras seis por incendios provocados por imprudencia grave.
El 31 de agosto fue detenida una mujer como supuesta autora de dos incendios forestales cometidos de forma intencionada. Otra persona fue detenida el 30 de agosto como presunto autor de un delito de incendio forestal intencionado ocurrido en inmediaciones de la localidad de Aldeanueva del Camino, con dos focos.
La investigación de un incendio ocurrido el 27 de julio en Valdefuentes que afectó una hectárea de pastos e higueras permitió identificar al conductor de un vehículo que había circulado por la zona de inicio, quien reconoció su implicación en el fuego. Fue detenido como supuesto autor de un delito de incendio forestal intencionado.
Seis investigados por imprudencia grave
En la localidad cacereña de Arroyomolinos de la Vera tuvo lugar un incendio que se inició en una parcela de frutales, donde se habían acumulado restos de tala y serrín que favorecieron la propagación del fuego. El titular de la propiedad fue investigado como supuesto autor de un delito de incendio forestal por imprudencia grave.
La investigación de un incendio ocurrido el 17 de junio que se originó en el recinto de una piscina natural en Valdecañas de Tajo determinó que las ramas de un árbol ornamental habían impactado contra un tendido eléctrico, desprendiendo material incandescente que provocó el fuego. Ante la negligencia en el mantenimiento de la línea eléctrica, un hombre fue investigado como supuesto autor de un delito de incendio forestal por imprudencia grave.
En la localidad de Ceclavín un incendio ocurrido el 20 de junio calcinó en torno a 300 hectáreas de pastos. El foco de inicio se encontraba junto a un cañón detonador utilizado como espantapájaros que con cada detonación provocaba pequeñas llamas que originaron el fuego. Como consecuencia, fue investigado el propietario del aparato como supuesto autor de un delito de incendio forestal por imprudencia grave.
Alguno de los arrestados lleva tres meses en prisión provisional
A su vez, en Aldea del Obispo (Cáceres) un incendio ocurrido el 15 de junio afectó en torno a 15 hectáreas de gramíneas y leguminosas. El Seprona localizó el punto de inicio y determinó que el fuego se había originado por la negligencia de un vecino al quemar residuos domésticos. El viento desplazó las pavesas hacia material combustible seco, provocando el incendio.
Una vez determinadas las causas, se procedió a la investigación del responsable como supuesto autor de un delito de incendio forestal cometido por imprudencia grave. Las diligencias instruidas en cada caso han sido puestas a disposición de la autoridad judicial competente.
Así, en mayo, lograron la detención de un individuo supuestamente implicado en siete incendios forestales intencionados en la zona de Casas del Castañar y Cabrero (Cáceres). La autoridad judicial decretó su ingreso en prisión provisional, donde permanece tres meses después de su detención.