Muchos taxis se plantaron ayer en pleno corazón de Madrid, en La Castellana y sus alrededores, para protestar por las 8.500 nuevas licencias que la Comunidad de Madrid va a conceder a la empresa de VTC, Cabify. Unos 4.000 según la organización; unos 900, con datos de Delegación del Gobierno y unos 400 con las cifras que baraja en Ayuntamiento. La convocatoria fue secundada por la Federación Profesional del Taxi, pero no por otras dos plataformas que operan en la región, como la Asociación Gremial del Taxi en Madrid y la Plataforma Caracol, que se desmarcaron.
En Madrid, las tres empresas de VTC que están plantando cara al sector del taxi son Cabify, Uber y Bolt, que en su conjunto tienen operativos unos 9.000 vehículos. En la Comunidad de Madrid, la cifra de taxis se eleva a unos 16.000 y no se mueve apenas desde hace años.
¿Por qué se conceden ahora 8.500 licencias a Cabify?
En el año 2018, Cabify solicitó 8.500 licencias, que fueron denegadas por la Administración madrileña bajo el argumento de que había que cumplir la norma de una licencia de VTC por cada 30 de taxi, aprobada por aquel entonces por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, cuando estaba al frente de dicho departamemto José Luis Ábalos. En el año 2023, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) invalidó ese criterio por considerarlo “desproporcionado”. A raíz de esa decisión del TJUE, el Tribunal Supremo de España ordenó la revisión de los expedientes. Finalmente, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid falló a favor de Cabify, reconociendo la procedencia de las licencias y la obligación de concederlas. La Comunidad de Madrid se ha visto obligada a acatar los distintos autos. La semana pasada, la Comunidad de Madrid le comunicó en una reunión a la compañía la decisión y posteriormente le ha mandado una carta con los plazos. En principio, Madrid le concedió un mes para presentar toda la documentación, pero finalmente se alargará hasta un mes y medio a petición de la propia Cabify, que había pedido hasta 2 meses.
¿La actual oferta de taxis y VTC suple la demanda?
En estos momentos, operan en la Comunidad de Madrid unos 16.000 taxis y unos 9.000 vehículos de VTC. Un reciente estudio de la Universidad Politécnica de Madrid concluía que hacen falta entre 8.300 y 11.000 licencias adicionales para los próximos años, ya sean de VTC o taxis para cubrir la demanda de forma correcta.
¿Qué nueva batalla legal han abierto los taxistas?
La Federación Profesional del Taxi presentó ayer a la fiscalía de la Comunidad de Madrid un expediente para que se investigue. El colectivo de taxistas alude que puede haber “presuntas irregularidades” en las solicitudes. No tanto por parte de la empresa afectada, sino porque los coches que se asociaron a esa compañía ya no trabajan con ella o funcionan como vehículos de alquiler.
¿Cuándo esos 8.500 vehículos podrán circular por las calles de la capital?
La Comunidad de Madrid le ha dado a Cabify como mes y medio para presentar toda la documentación. Es decir, en la primera quincena de julio, la Administración tendría que tener toda la información de los expedientes para analizar. Después, el Gobierno autonómico se puede tomar su tiempo para estudiarlos. El año pasado, estuvo 5 meses. Una vez revisados todos los expedientes y comprobado que cada licencia corresponde a una matrícula, Cabify recibirá la autorización definitiva y esos coches podrían ponerse en circulación bajo su plataforma. Actualmente, Cabify trabaja con coches propios, con autónomos y con taxistas, que utilizan su plataforma de contratación.
¿Por qué la empresa de VTC alega que no son competencia total?
Un total de 5.000 taxistas trabajan con la plataforma de Cabify. Es decir, que algunos clientes al abrirla optan por contratar un taxi asociado por distinto motivo, léase precio,rapidez o cercanía. En el 2023, último año disponible, esos taxis facturaron más de 12,5 millones netos a través de Cabify.
¿Hay demanda desatendida?
En horas punta, los fines de semana y durante la celebración de grandes eventos, la demanda no atendida en Madrid puede exceder el 60%, lo que provoca tiempos de espera elevados y dificultades en la movilidad. Además, al ser escasa la oferta, los precios se suelen disparar. No obstante, algunas plataformas el día del apagón eléctrico (el pasado 28 de abril) desactivaron los precios dinámicos y los sustituyeron por tarifas fijas, que aplicaron durante dos días. El problema fue que durante las primeras horas, en las plataformas los precios se dispararon por los problemas en el metro, pese a que los conductores no lograban tampoco recibir las peticiones. Hacia el medio día, por ejemplo, Cabify activó un precio de tarifa plana de 10 euros por recorrido.
Un trayecto en VTC puede ser un 30% más barato que en un taxi. Por ello, según una encuesta el 62% de las personas consideran el precio más reducido como principal ventaja de los VTC frente a los taxis y el 23% piensa que es más fácil acceder a un vehículo disponible a través de las plataformas tecnológicas, que tener que hacer la reserva vía telefónica.