El aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid Barajas ha sufrido esta mañana del miércoles interminables colas para acceder a las terminales, sobre todo en la T-4 satélite, desde donde salen los vuelos internacionales. La saturación en los filtros de control del pasaporte ha provocado largas esperas, aglomeraciones y un clima de tensión en el arranque de la temporada de verano en una de las terminales más transitadas del país.

Colapso en los controles de pasaportes de la T-4 satélite de Barajas
Esta congestión se viene dando ya desde hace unos días, pero hoy ha alcanzado el pico máximo con retrasos de hasta 60 minutos, lo que ha provocado que algunos pasajeros han perdido su vuelo.
Fuentes aeroportuarias afirman que los problemas derivan de la falta de personal policial. A las 11.00 horas, momento pico de salidas de vuelos internacionales, la terminal contaba tan solo con 8 efectivos para esta tarea, aunque hay puestos para 16, sostienen.
Desde el ministerio del Interior se atribuyen las colas a un problema informático “puntual” ya subsanado y a la acumulación de vuelos en un espacio de tiempo muy breve. Interior sostiene que había 16 cabinas de control operativas en la terminal con dos agentes cada una de ellas, es decir, que trabajaban más de 30 policías.
Quejas de la Mesa del Turismo
La Mesa del Turismo ha reaccionado a este hecho catalogándolo de “absolutamente inadmisible” y ha criticado que, aunque los puestos estén instalado, la dotación de agentes de Policía Nacional sigue siendo insuficiente, “lo que provoca que estos puestos permanezcan cerrados y que, en consecuencia, se generen situaciones de nerviosismo, altercados y pérdidas masivas de vuelos de conexión internacional”.
Según la entidad, la situación ha requerido la intervención de la Guardia Civil para gestionar la “tensión” que se ha generado entre los viajeros. “Cientos de usuarios desesperados, muchos de ellos en tránsito, han perdido sus vuelos y viven con frustración un espectáculo caótico impropio de un aeropuerto internacional de primer nivel”, añade la Mesa del Turismo en un comunicado en el que su presidente, Juan Molas, destaca que “no es un fallo puntual ni una circunstancia imprevisible, sino una negligencia reiterada por parte del Ministerio del Interior”.
Decenas de viajeros enfadados han relatado en redes sociales sus protestas y quejas por la falta de personal, lo que retrasaba el acceso a la terminal: mostraban auténticas mareas humanas intentando acceder a las puertas de embarque. Incluso, ha tenido que intervenir la Guardia Civil para contener la situación de nervios de algunos turistas.
La postura de Aena
La empresa pública Aena niega que se haya producido un colapso, aunque admite grandes problemas. El resultado ha sido que cientos de turistas han perdido sus vuelos al tener que esperar durante mucho tiempo para pasar los controles de seguridad. La falta de personal de la Policía Nacional, que es la encargada de validad los pasaportes para entrar y salir del país, ha generado el cuello de botella. Desde el gestor aeroportuario aseguran que “están colaborando estrechamente con las fuerzas de seguridad para recuperar la normalidad lo antes posible”. Hacia las 15 horas, fuentes oficiales de Aena aseguran que “la normalidad casi ya se ha restablecido”.
Desde la Comunidad de Madrid, el consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, ha advertido de la “imagen deplorable” que se traslada de España con esas imágenes. ”España no puede permitirse esta imagen deplorable del sistema de transportes gestionado por el Gobierno de Sánchez, que nos está llevando al caos”, ha escrito en X.