El alcalde de Calella (Maresme) ha vuelto a estallar contra los delincuentes multirreincidentes que mantienen en vilo a las fuerzas de seguridad. Marc Buch clama contra la laxitud de la justicia y pide a los jueces “que apliquen el sentido común” antes de dejar en libertad a individuos como los que protagonizaron un grave altercado en la ciudad maresmense.
La noche del viernes, un ciudadano observó como dos delincuentes habituales, multirreincidentes, acosaban a una chica y les llamó la atención para que dejaran de hacerlo. Lejos de aceptar, los dos maleantes se revolvieron contra el vecino que les recriminaba su actitud y la emprendieron a golpes con él, por lo que dieron aviso a la policía. Al llegar los agentes, también fueron agredidos por los dos individuos, que finalmente pudieron ser reducidos.
La situación, sólo habría pasado a engrosar las denuncias de estos delincuentes en la policía local, de no haber sido por la decisión de la juez de guardia de Arenys de Mar. Los dos detenidos, al llegar al juzgado también protagonizaron graves altercados, por lo que se movilizó a los miembros de seguridad para reducirles. Pese a todo ello, la juez decretó la puesta en libertad de los dos individuos.
”Acosan a una chica, agreden a un ciudadano y a los agentes de la policía, la lían en los juzgados y salen libres” claman ahora algunos comerciantes y vecinos de Calella, que se preguntan: ”¿qué más tiene que pasar para que estos individuos entren en la cárcel, tiene que morir alguien para que esto cambie?.
El incidente ha provocado la indignación del alcalde de Calella, Marc Buch, que a través de las redes sociales reporta el caso que tuvo lugar la noche del viernes, concluyendo en lamentar que “ya los volvemos a tener por las calles con toda impunidad” gracias a una decisión judicial que define como insólita.
El edil, que lidera la reivindicación de varios municipios catalanes de Junts para endurecer el código penal y “aplicar las leyes de extranjería” para expulsar a los delincuentes inmigrantes multirreincidentes no duda también en reclamar a los jueces que “apliquen el sentido común”. Hace años que los municipios que sufren estas situaciones reclaman un cambio en la legislación, pero la iniciativa parlamentaria está encallada en el Congreso de los Diputados.