En un comunicado oficial, el gobierno del Ayuntamiento de Caldes d'Estrac (Maresme) ha dado a conocer que en el pleno del lunes 28 de julio, Marta Romero, concejala del Grupo de Gent d’Estrac (GdE), que comparte gobierno con Junts per Caldes, en el punto referente a la Planificación y Ordenación de Personal, rompió la disciplina de voto argumentando falta de diálogo con algunos trabajadores y áreas del Ayuntamiento. Su decisión no impidió que el punto se aprobara con los votos a favor del resto de integrantes del Gobierno, pero ha mostrado una situación insólita y preocupante que consideramos que la ciudadanía debe conocer de primera mano.
Por su parte, a través de las redes sociales, la concejala expulsada del gobierno defiende que “mi decisión no fue ningún acto de improvisación ni falsedad, sino una opción consciente y responsable”. En cuanto a su futuro político, Romero explicita que “mantengo íntegramente la responsabilidad y el compromiso con los vecinos y vecinas de Caldes”. y critica a su antigua formación donde detalla que la decisión de expulsarla ”no haya sido tomada de forma colegiada, sino por la voluntad de una sola persona” en referencia explícita a Albert Batlle.
En cuanto a Gent d'Estrac, que lanzó un segundo comunicado paralelo al del gobierno, subrayan que la expulsión de su concejala fue que “actuó por su cuenta, argumentando falsamente y sin comunicar su decisión hasta poco antes del Pleno, a pesar del tiempo transcurrido desde la fecha del acuerdo que consta en un acta firmada por los presentes en la Mesa de Negociación”. Pese a la acusación, matizan que “no caeremos en la tentación de hacer debates públicos respondiendo falsas acusaciones, ni tampoco replicando las fake-news a las que algunos quieren habituarnos”.
En el mismo pleno, siempre según el comunicado oficial, el portavoz de GdE, Albert Batlle, corroboró que la concejala Romero comunicó esta postura a su Grupo media hora antes de iniciar la sesión plenaria y recalcó que el voto y la intervención de la concejala no respondían a una decisión del conjunto del Grupo, sino que era una decisión particular suya. GdE está en desacuerdo con la argumentación de la concejala Romero, ya que concejales de GdE han participado desde hace meses en la negociación con los representantes de los trabajadores municipales hasta lograr el consenso necesario.
Albert Batlle y la nueva alcaldesa, Elisabet Segura .
La última Mesa de Negociación con representantes de los trabajadores y sindicatos, previa al pleno, se celebró el día 17 de julio, donde, tras análisis y debate, se aprobaron los acuerdos por unanimidad de todos los presentes, informa la coalición caldense. El Gobierno valora muy positivamente este hecho previo al Pleno, motivo por el cual se consideró que no existía ninguna discrepancia.
Tras la decisión de la concejala de emitir un voto particular y desvincularse de la opinión consensuada de GdE y JxC (los dos grupos del Gobierno), ayer, 29 de julio de 2025, el GdE acordó excluir de su Grupo Municipal a la concejala Marta Romero debido a “las continuadas desavenencias en la gestión municipal y por su escasa implicación en las tareas de gobierno” que en su día le fueron encomendadas en aplicación del pacto firmado entre las formaciones políticas de GdE y JxC.
Al mismo tiempo, el Grupo Municipal de GdE ha pedido que Marta Romero devuelva su credencial de concejala, para que otro miembro de la candidatura pueda ocupar el puesto que la ciudadanía otorgó al partido en las últimas elecciones municipales de 2023. Inicialmente, Romero mantiene el acta de regidora y pasará a ser no adscrita.
la transparencia es uno de los principios fundamentales de las personas que integramos el gobierno
La decisión del Grupo Municipal de GdE ha supuesto que la alcaldía haya retirado las atribuciones de gobierno que hasta hoy ostentaba Romero, razón por la cual, a todos los efectos, se considera que ya no es miembro del Gobierno Municipal.
En declaraciones de la alcaldesa Beth Segura: “la decisión de retirar las competencias delegadas a la concejala Romero ha sido consensuada entre GdE y JxC, en virtud del pacto de legislatura”.
El portavoz de GdE, Albert Batlle, afirma que “esta decisión no es el resultado estricto de la discrepancia evidenciada en la votación del Pleno del 28 de julio, sino que responde a una reiterada mala praxis de la concejala a pesar de varios intentos de reconsideración y compromisos de rectificación. La situación ya hacía tiempo que era prácticamente insostenible y lo sucedido en el Pleno solo ha sido la gota que ha colmado el vaso”.
A su vez, Batlle también declara que “ha sido una decisión muy dolorosa que nunca hubiéramos imaginado tener que tomar, pero por encima de nuestras opciones personales, están los valores y objetivos políticos con los que GdE se presentó a las elecciones”. Ha sido una decisión consensuada tanto por los concejales como por los miembros de la formación política de GdE.
Finalmente, la alcaldesa Beth Segura reitera que “la transparencia y las normas de buen gobierno son uno de los principios fundamentales de la actividad pública de las personas que integramos el gobierno del Ayuntamiento”, y por este motivo tanto ella como el resto del Gobierno se ponen a disposición de los medios de comunicación y de la ciudadanía para responder a las preguntas y dudas que quieran plantear.


