La política vasca se ha visto en las últimas horas invadida por una sensación de déjà vu, al hilo de los incidentes que se han producido en las localidades de Azpeitia y Vitoria-Gasteiz y las reacciones que han provocado. Después de que desde el Gobierno vasco criticasen con dureza “el nulo apoyo de EH Bildu” a la Ertzaintza tras los altercados registrados en Azpeitia y pocas horas después de que se viviesen en la capital alavesa escenas de tensión con motivo de una carga de la Policía vasca contra una acampada de GKS -agrupación socialista que surgió tras una escisión en las juventudes de Sortu-, EH Bildu ha enviado un comunicado cargando con dureza contra “el modelo policial” vasco, ya que “con demasiada frecuencia se aleja de los principios democráticos que deberían guiar su labor: proporcionalidad, contención y prevención de daños mayores”.
La dureza del comunicado, muy crítico con la labor de la Policía vasca, hace prever que la polémica irá a más en las próximas horas y amenaza con convertirse en uno de los temas del verano político en Euskadi.
Relatos contrapuestos
Desde EH Bildu, han denunciado que “en Azpeitia, la Ertzaintza irrumpió de madrugada en un recinto festivo abarrotado por una pintada realizada con bolígrafo, provocando graves altercados”.
Esa versión contrasta con la transmitida por el consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, quien señaló que, después de que un joven fuese identificado por pintar en un contenedor ACAB (All Cops Are Bastards”, “un grupo de jóvenes se presentó en el Ayuntamiento de Azpeitia a pedir explicaciones a la Policía municipal porque habían acompañado a la Ertzaintza en el momento de la identificación”.
“Tres personas entraron en las oficinas de la Policía municipal, se enfrentaron a los policías y abrieron la puerta. Y más de cuarenta personas entraron al interior de las oficinas. Los agentes pidieron apoyo y ayuda a la Ertzaintza. Y la primera presencia de la Ertzaintza fueron tres patrullas que estaban en los alrededores, que acudieron a apoyarles. Son ertzainas que hicieron lo que pudieron y que terminaron en el suelo. Hubo robos de 'talkies'. Hubo robos de esposas. Hubo agresiones. Y hay dos ertzainas heridos”, señaló.
Mientras, en relación con los altercados registrados en Vitoria-Gasteiz, EH Bildu ha denunciado que la Ertzaintza “cargó con violencia contra una acampada no comunicada”, pero pacífica en la Plaza de la Virgen Blanca, con personas de todas las edades presentes”. “Ambas intervenciones son del todo desproporcionadas y, por tanto, inaceptables”, han indicado.
En esta línea, la formación independentista ha hablado de un problema estructural y ha puesto sobre la mesa otros episodios que considera censurables: “Hechos como la amputación de un testículo a un joven por una actuación policial desproporcionada este pasado abril, la agresión a una aficionada de la Real Sociedad en Anoeta en marzo del año pasado, las graves lesiones provocadas en un ojo a un joven en Tolosa un mes antes o las amenazas vertidas en su día contra el Gobierno por parte del autodenominado movimiento asindical ‘Ertzainas en lucha’ muestran que el problema es estructural. Incluso el propio Gobierno Vasco ha reconocido en ocasiones lo inaceptable de algunas actuaciones y, con ello, la existencia de dicho problema”.
Respuesta al Gobierno vasco
A partir de ahí, la coalición abertzale ha querido responder al consejero de Seguridad del Gobierno vasco, quien censuró que haya “movimientos en este país que todavía cuestionen la existencia de la Ertzaintza y que la mera presencia de un ertzaina en un espacio público sea un problema para ellos”.
Así han replicado al Ejecutivo vasco desde EH Bildu: “La ciudadanía demandó una policía democrática, civil y al servicio de la comunidad, y no una que reproduzca lógicas autoritarias del pasado. EH Bildu exige una reflexión y una reforma en profundidad del modelo policial. La sociedad vasca merece una policía que respete los derechos, actúe con responsabilidad y resuelva los problemas y los conflictos sin agravarlos. En definitiva, una policía que recupere los principios y valores democráticos sobre los que Telesforo Monzón erigió la Ertzaintza y que abrazó una amplia mayoría de la sociedad vasca: una policía civil, democrática y euskaldun al servicio de la ciudadanía vasca”.
El choque entre el PNV y EH Bildu en relación con la Ertzaintza es recurrente, aunque los términos en los que se están produciendo los últimos cruces de declaraciones hacen prever un recrudecimiento de la tensión entre ambas formaciones.