Se avecinan fechas festivas en las que el Alicante playero invita al paseo, pero no al baño de mar -salvo a escandinavos o vascos, que siempre hay alguno en el agua- por lo que las calles del casco antiguo registrarán numeroso tránsito de turistas. Miles de visitantes a quienes, en parte por la indolencia municipal que se resiste a señalar de forma clara y políglota sus mayores atractivos culturales, se les pasará por alto que Alicante es más, bastante más, que arroz, sol y un viejo castillo.
Si el MARQ ha colocado a la ciudad en el mapa europeo de las muestras arqueológicas captando asiduos visitantes que no se pierden ninguna de sus muestras temporales, en el corazón de la ciudad, a pocos metros de la gigantesca Sagrada Familia que ocupa estos días la plaza del Ayuntamiento (de dudoso gusto artístico, para qué vamos a engañarnos), merecen una visita dos museos de indudable calidad: el MACA, de arte contemporáneo, y el MUBAG, museo de Bellas Artes, cuya exposición permanente muestra una espléndida colección del siglo XIX que, en 80 obras, recoge lo más interesante de los artistas vinculados a Alicante.
La próspera ciudad italiana se situó en la Europa que entraba en el siglo XX como emporio de la modernidad artística
Pero estos días, además, y hasta el próximo 4 de mayo de 2025, en su segunda planta ofrece una imperdible exposición -Milán, vitrina de la modernidad- con obras de 40 artistas italianos entre los que figuran grandes maestros como Modigliani, De Chirico o Marinetti.
En torno a la gran Esposizione Universale di Milano de 1906, la próspera ciudad italiana se situó en la Europa que entraba en el siglo XX como emporio de la modernidad artística, urbe original movimientos de vanguardia como el Futurismo de Marinetti y Boccioni.

Retrato, obra de Modigliani, que puede verse en el Mubag de Alicante hasta mayo de 2025.
Tras la Primera Guerra Mundial, se produjo una tendencia hacia la recuperación del clasicismo, que dio lugar al nacimiento del Novecento italiano que se expandió a todo el país. La muestra del Mubag recoge obras de este periodo y de los artistas que, como desde muchos rincones de Europa, acudieron al bullicioso París de los 20 y 30, en cuyos cafés, estudios y galerías hallaron inspiración y, en algunos casos, reconocimiento.
En las salas del Mubag llegamos luego al rincón del abstraccionismo histórico italiano que se desarrolló a partir de 1934, con los pintores abstractos del Grupo de Como. Y la exposición se cierra con 'Corrente', tendencia anticlásica formada por jóvenes intelectuales y artistas con afán de cambio. Hasta que llegó el fascismo, la guerra, y una ciudad destrozada por los bombardeos de 1943.

Cuadros de 40 artistas italianos prestados por numerosos museos, galerías y colecciones privadas componen la exposición 'Milán, vitrina de la modernidad'
Tratándose de Milán, la exposición no olvida que hablamos de la capital italiana de la moda, por lo que a los cuadros que cuelgan en las distintas salas del museo les acompañan algunos vestidos singulares de alta costura correspondientes a las distintas épocas artísticas.