El enredo a varias bandas en que se ha convertido la obra de lo que debería ser la nueva sede de la Cámara de Comercio de Alicante se complica. El informe de la Concejalía de Urbanismo que calcula en más de 1.500 metros cuadrados el espacio fuera de la legalidad contemplado en el proyecto, que la Cámara pretende ganar al convertir en dos plantas la zona que ocupaba el antiguo cine, supone un torpedo a la línea de flotación de una inversión que el presidente de la entidad, Carlos Baño, justificó precisamente por la necesidad de ganar espacio.
En el pleno de abril de 2023 en el que la asamblea de la Cámara de Comercio aprobó por unanimidad el traslado y una obra que se adjudicó por más de 3,3 millones de euros, Carlos Baño resaltó que la nueva sede “permitirá reunir en un mismo edificio los servicios administrativos, de atención y asesoramiento a empresas y los espacios formativos, además de contar con unas instalaciones más modernas, amplias y funcionales”. Y facilitaría además poner en marcha su ambicioso proyecto formativo, “el Campus Cámara School” (convertido en Campus Cámara CEU al incorporar como socio a la Universidad privada).
Baño contaba entonces con que los 4.800 metros cuadrados previstos albergarían la sede administrativa, así como las aulas y despachos de la escuela de negocios
Baño contaba entonces con que los 4.800 metros cuadrados previstos albergarían la sede administrativa, así como las aulas y despachos de la escuela de negocios, más “un área específica para el Cámara Business Club; un salón de actos más espacioso que el actual, apto para la celebración de los plenos de la Cámara así como otros eventos, presentaciones o ruedas de prensa, y cuyo uso será abierto también para aquellas empresas o entidades que lo soliciten; o una zona de salas box para uso de las empresas que así lo necesiten”.
De hecho, la Cámara ya ha adjudicado varios contratos para “vestir” una sede que pretendía inaugurar esta primavera. La empresa Ascender S.L, ha obtenido uno por 71.508 euros para surtir de butacas el salón de actos y otro por 68.400 para una grada telescópica. Y la firma de muebles Actiu, que ya recibió ese encargo en la sede del viejo Hotel Palas, se ha adjudicado por 116.945 euros el contrato del mobiliario de oficinas para las instalaciones de Panoramis.
Si lo que la aduce la Concejalía de Urbanismo, que al construirse una planta que no estaba contemplada en el proyecto inicial se han levantado tres, una más de las previstas, obliga a la Cámara a rectificar, Baño y su equipo se verán también obligados a modificar todo su planteamiento.
Los técnicos de Urbanismo señalan que esa planta adicional aumenta la edificabilidad casi 1.600 metros cuadrados, cuando la licencia de construcción del centro comercial de Panoramis, obtenida en 1999, ya había consumido toda la edificabilidad posible según el Plan Especial del Puerto.
Los técnicos de Urbanismo señalan que esa planta adicional aumenta la edificabilidad casi 1.600 metros cuadrados
La portavoz del Ayuntamiento, Cristina Cutanda, declaró el jueves que Urbanismo ha remitido el informe a la Autoridad Portuaria, propietaria de los terrenos, y que es a esa institución a quien corresponde tomar una decisión. Ante el mutismo del presidente Luis Rodríguez, fuentes jurídicas consultadas por La Vanguardia ven complicado que la entidad portuaria pueda contradecir a Urbanismo o encontrar una salvedad legal que legalice el proyecto paralizado, y muestran su sorpresa por el hecho de que, tanto el Puerto como el Ayuntamiento, conocedores de la importancia de la obra, se hubieran conformado con admitir una declaración responsable antes de darle luz verde.
Se da la circunstancia de que las distintas partes afectadas por el contencioso coinciden en el Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria, puesto que Carlos Baño, en su condición de presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación, es su vicepresidente, y el alcalde Luis Barcala y la concejala de Urbanismo, Rocío Gómez, cuyo departamento ha parado los trabajos, son vocales del mismo consejo. Su próxima reunión promete ser interesante.